R. L./AGENCIAS
La consellera d'Obres Públiques, Mabel Cabrer, dijo ayer que la decisión de Aeropuertos Nacionales y Navegación Aérea (Aena) de denegar la cesión de los terrenos para la construcción del último tramo de la autovía al aeropuerto obedece a «razones políticas» dado que «no hay ninguna causa técnica» que avale la decisión del Ministerio de Fomento. Cabrer respondió de este modo a la decisión del Consejo de Administración de Aena de rechazar la cesión de terrenos porque, según el organismo, «podrían resultar necesarios para futuros usos aeroportuarios».

El pasado 4 de abril Aena desmintió en un comunicado que se hubiera acordado esta cesión de terrenos para acabar la autovía del aeropuerto con cuatro carriles hasta la misma terminal, tal y como había anunciado a la prensa la consellera un día antes. De hecho, Cabrer siguió manteniendo ayer que se había alcanzado ese acuerdo y como prueba expuso que en su correo electrónico figura el borrador del «convenio de cesión» que «Aena remitió a la secretaría general técnica de la Conselleria, lo que significa que Aena estaba muy convencida de la cesión de estos terrenos».

Aena justifica su decisión señalando que los terrenos que solicita el Govern pueden ser necesarios más adelante, una posibilidad que la consellera desmintió afirmando que en el Plan Director del aeropuerto consta que este suelo está destinado a construir viales y accesos al aeropuerto. «Van contra su propio Plan Director», dijo Cabrer, que anunció que si el PP vuelve a gobernar en Madrid aplicarán criterios técnicos «y no políticos» para «beneficiar a los ciudadanos». La consellera remarcó además que no sólo «no ha mentido», sino que para anunciar a la prensa el acuerdo obtuvo el consentimiento explícito del Director de Planificación de Infraestructuras de Aena, José Manuel Hesse. El propio Hesse explicó cuando se desmintió la noticia que el acuerdo alcanzado era tan sólo «técnico» y así creyó que lo había entendido la consellera.

Aena indicó ayer que ha decidido zanjar las noticias contradictorias sobre este asunto y por eso lo sometió al Consejo de Administración. Aena recordó asimismo que estos terrenos podrían ser necesarios, teniendo en cuenta además que el aeropuerto está situado al lado de un parque natural y su zona periférica de protección, lo que hace muy complicadas las futuras ampliaciones.