Las instituciones a las que optan un mayor número de formaciones en Eivissa son las del Consell y el Parlament. Además de PP (Pere Palau) y PSOE-Eivissa pel Canvi (Xico Tarrés), se presentan candidaturas de Unión Cívica, Democracia Pitiusa y Democracia Nacional. También a los ayuntamientos de Sant Josep y Sant Antoni concurren tres formaciones y a Vila cuatro. Los consistorios que han atraído menor número de partidos son Santa Eulària y Sant Joan con dos. Para el Ayuntamiento-Consell de Formentera se produce la mayor acumulación de candidaturas: PP, PSOE, PREF, GUIF y GxF, mientras que los pactos al Parlament han dejado en dos la pugna: PSOE-GxF y PP-GUIF.

Estos comicios se caracterizan por una vuelta a la normalidad en Eivissa después de la gran cantidad de formaciones que se presentaron a las elecciones de 2003. Muchas de ellas han sido absorbidas por el PP, que ha realizado pactos con el PREF en Vila y Sant Josep y ha fichado a destacados candidatos de ASI para las listas de Vila (Julián Córdoba) y el Parlament (Rosario Àlvarez). En Santa Eulària además va en listas del PP Richard Kehrli, de Unión Democrática Balear, partido que la legislatura pasada se presentó en Sant Josep y Santa Eulària consiguiendo cerca de 300 votos. «El candidato del PP de Santa Eulària tiene unos objetivos calcados a los nuestros», explicó a este periódico el propio Kehrli.

El Partido Popular intentó también pactar con Unión Cívica (UC), que finalmente rechazó la oferta porque no quiso renunciar a sus siglas. Esta formación presenta a la farmacéutica Araceli Costa Àvila como número uno al Ayuntamiento de Sant Josep y a Juan Francisco Bermejo de cabeza de lista para el Ayuntamiento de Vila, el Consell y el Parlament. El presidente de UC, Javier Abril, explicó que han renunciado a presentarse en consistorios como Santa Eulària, «porque está copado por el PP» y los dos partidos principales «están más distanciados». Respecto a su pacto frustrado con el PP, Abril indicó que no quieren desaparecer como formación y defraudar a sus 800 votantes. Además, los populares no accedieron la principal reclamación de UC: derogar la Ley de normalización lingüística.