GUILLERMO ROMANÍ
La primera evacuación médica realizada desde el nuevo Hospital de Formentera a Can Misses se produjo ayer a las 13,30 horas cuando un helicóptero del SAR trasladó a Bea Montero, de 30 años de edad al hospital de referencia de las Pitiüses debido a la inminencia del parto de su primer hijo. Se trata de la esposa de Miguel Àngel Roig, que hace unos días fue igualmente trasladado a Can Misses tras haberse visto afectado por un rayo que cayó a pocos metros de donde estaba la madrugada del pasado viernes.
Roig explicaba, mientras esperaba la llegada del helicóptero que se estaban «haciendo demasiado famosos en Can Misses» en clara alusión a lo sucedido días atrás y reconoció que no tenía ningún miedo ni problema en viajar junto a su mujer hasta el hospital: «Con el susto que pasamos pensé que a lo mejor ya daba a luz directamente cuando estábamos en Eivissa». Montero, que estuvo a punto de dar a luz a su primer hijo cuando su marido sufrió el accidente del que «todo ha quedado en un susto», decía él, comenzó a sentir los dolores propios del parto por la mañana y tras ser reconocida en el Hospital de Formentera, se decidió su traslado a Eivissa por cuanto el paritorio y el quirófano aún no han entrado en funcionamiento. Para sorpresa de más de uno la evacuación no se realizó con el habitual helicóptero de emergencias del área de salud pitiusa sino que se optó, por cuestión de seguridad, que el traslado se hiciera con el helicóptero del Ejército del Aire debido a la espesa niebla baja existente entre ambas islas.
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