El secretario general del PSIB, Francesc Antich, aseguró ayer que
el Govern no regula el todo incluido porque defiende los intereses
de «unos pocos» que, a su juicio, son «los mismos que han
amortizado su hotel en dieciséis ocasiones y ahora piden vía libre
para reconvertirlo en viviendas».
Antich se refirió así a las conclusiones del comité de expertos
convocado por el Govern en materia de todo incluido, que aconseja
controlar la calidad de este tipo de modalidad que oferta casi el
veinte por ciento de la planta hotelera, pero no regularla
legalmente. «El Govern sólo legisla cuando interesa a una minoría»,
destacó, en referencia a la derogación de la ecotasa.
Además, aventuró que con la autotasa sucederá «lo mismo»,
sosteniendo que no se aplicará porque cuenta con la oposición de
una mayoría del sector.
Por otra parte, el líder socialista consideró «obvio» que el
todo incluido es una influencia negativa para la industria
turística, al generar pérdida de puestos de trabajo en la oferta
complementaria. La diputada socialista por Baleares en el Congreso,
Isabel Oliver, quien acompañó a Antich en rueda de prensa, acusó al
Govern de no tener voluntad política para regular esta oferta.
Por su parte, el portavoz del Govern, Joan Flaquer expresó su
satisfacción por el hecho de que ocho de los nueve ponentes del
comité de expertos del «todo incluido» hayan coincidido en las
conclusiones finales sobre la incidencia de este producto en la
economía de las islas, pese a la disparidad ideológica de los
partidos que los nombraron. El único que votó en contra en el
comité fue el representante pitiuso, Chris Langley.
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