Las altas temperaturas registradas esta primavera condicionan que este verano pueda haber más medusas de lo normal en las playas de las Pitiüses. Así lo aseguró hace unos días a este periódico el biólogo del Consell Jaume Estarellas, quién, además, indicó que si no cambiaban las rachas de viento del norte era bastante probable que en cuestión de días llegara a la costa de la isla los efectos de la plaga de Pelagia noctiluca que afecta al Mediterráneo Occidental y que desde hace una semana afecta a Menorca y Mallorca.

Precisamente, ayer por la tarde se izó bandera amarilla en Platja d'en Bossa por el peligro de picaduras de medusas. El coordinador del Servicio Preventivo de Playas de Cruz Roja, Lucas Delbon, informó a este periódico que cada puesto de Platja d'en Bossa atendió a una media de 30 personas con picaduras, lo que obligó a suspender un curso de reciclaje de socorristas. Delbon indicó que hasta la fecha no se ha registrado una incidencia mayor de medusas que otros años, aunque aseguró que en previsión por la plaga que afecta a la costa mediterránea se han aumentado las reservas de material de cura: gasas y amoniaco líquido.

El Govern también tiene previsto hacer uso de los barcos de limpieza del litoral en el caso de que llegue la plaga de medusas. Estarellas asegura que es inusual que en estas fechas sople el viento del norte: «Lo normal es que sople xaloc, que es de poniente, y se lleve las medusas». El biólogo afirma, de todos modos, que este año seguro que habrá más medusas que el año pasado. «Se dan las condiciones para ello. Este año hemos tenido una primavera seca, muy soleada y sin temporales y el agua se ha calentado bastante», sostiene. El Govern recomienda que en caso de picadura no se aplique agua dulce ni se frote con arena o la toalla, pues el dolor podría ser incluso más intenso. Lo mejor es aplicar hielo durante 15 minutos usando una bolsa de plástico, nunca directamente.