J.T.B./AGENCIAS
A pesar de que el Gobierno de Zapatero anunció la semana pasada que se hace prácticamente imposible una revisión del convenio sanitario entre Madrid y Balears y que quien quiera mejorar la dotación de su sistema deberá hacerlo a través de imposiciones autonómicas, los socialistas de Balears han anunciado que el Ejecutivo central incorporará a los Presupuestos del Estado del próximo año una partida específica para la Sanidad que incluirá a la población a la hora de determinar su financiación.

Fue el anuncio que efectuaron el secretario general del PSIB, Francesc Antich (diputado por Balears) y la dirigente federal del partido, Francina Armengol.

Antich criticó que el conseller de Economia, Hisenda e Innovació, Lluís Ramis de Ayreflor, opte por crear «crispación» y actúe con «doble cara» cuando se reúne con representantes del Gobierno central, como esta semana con el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, extrayendo conclusiones distintas a las del resultado de la reunión que, según el socialista, fue tranquila y sin discusiones.

«Ramis debería negociar y conseguir mejores resultados para intentar dar una solución a un problema que creó su partido», agregó Antich. Al respecto, Armengol aseveró que su partido apoyará al Govern en su petición de mayor financiación sanitaria para Balears, pero advirtió de que «vigilará» el gasto público y se mostró radicalmente en contra de que el nuevo hospital de Palma se construya en Son Espases. De hecho, los socialistas mantienen que habría financiación si se recuperara el proyecto anterior, el que estaba previsto que se celebrara en Son Dureta.

Rosa Estaràs, consideró hoy «demagógico» que la oposición busque «obstaculizar un compromiso que es de Estado», en referencia a la financiación de la sanidad, al condicionar su apoyo al Govern balear a un mayor control del gasto y a la paralización del proyecto del hospital Son Dureta.

Tras el habitual Consell de Govern, Estaràs estuvo de acuerdo con la necesidad de que haya un efectivo control de gasto sanitario pero señaló que esta condición, así como la relativa a la construcción de Son Dureta en la finca de Son Espases, sólo es un modo de los grupos de la oposición de «buscar una excusa» para no apoyar al Ejecutivo autonómico.

Matas, por su parte, señaló que no se creía que la decisión de aplazar la conferencia de presidentes se deba al cambio de gobierno en Galicia. Dijo que se debe a problemas con el tripartito de Cataluña.