Se trata de una cuestión que había puesto en estado de alerta al
sector de la construcción de Formentera ante los hechos sucedidos
días atrás con el accidente de la nave Bahía de Málaga en la bocana
del puerto de Denia. «El Manuel Azaña sigue operativo diariamente
y, a través de él, se satisfarán todas las peticiones y necesidades
del sector para transportar arena desde la península hasta
Formentera vía Eivissa», comentó Joan Cerdà, de Baleària.
En este sentido, recalcó dos puntos importantes, en primer lugar
que «las bodegas del Manuel Azaña son superiores en capacidad a las
del Bahía de Málaga por lo que ello no supone ningún problema para
el sector de la construcción» y recordó que la naviera se
comprometió tiempo atrás que en caso de que la conexión entre la
península y Formentera no fuera directa, como durante este verano
se realizó a través del Nixe «el sobrecoste que supone el traslado
de las bañeras de arena desde Sant Antoni, donde atraca el Manuel
de Azaña y el puerto de Eivissa, donde serán embarcadas en el
Arlequín Rojo, será totalmente asumido por la naviera». Sí se
reconoció desde la naviera que en algunos viajes del Arlequín Rojo,
habrá una limitación de espacio pero desde Baleària se considera
que globalmente no habrá ningún problema de abastecimiento, a
Formentera.
El sector de la construcción está a la espera de ver en qué
medida la naviera es capaz de transportar desde la península la
arena necesaria para las obras que se están poniendo en marcha una
vez finalizada la moratoria temporal debido a la temporada
turística.
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