Ni para pagar la factura de luz, agua, el material docente y ni siquiera los bolígrafos. La asignación presupuestaria de los institutos de secundaria para comprar este tipo de material procede de las arcas de la Conselleria d'Educació del Govern. Sin embargo, el pago del tercer plazo de la cantidad anual que se recibe por la administración, prevista en septiembre, se ha retrasado y los institutos ya empiezan a sufrir problemas para hacer frente al mantenimiento.

La Conselleria d'Educació calcula que en dos o tres semanas se pagará lo que se debe. «El gasto personal está garantizado», comentaba un portavoz de Educació que atribuyó el retraso a «problemas en trámites burocráticos pero se ha solucionado».

La Asociación de Directores de Secundaria de las Pitiüses dio a conocer esta semana que aún no han recibido ese dinero. El presidente del colectivo, Marià Juan, se puso ayer en contacto con la delegación de Educació, que tan solo le comunicó que el director de Planificació i Centres del Govern, Rafel Bosch, se desplazará a Eivissa la semana próxima. «Hay centros que están muy mal, porque no queda dinero. Parece que sólo los centros pagamos el agua y la luz, pero también hay que hacerse cargo de la actividad docente», apunta Marià Juan. El director de Isidor Macabich expone las dificultades existentes, sobre en todo en centros como el que dirige donde se necesita una material para los talleres formativos, como componentes para el taller de electrónica o alimentos. «Los alumnos de cocina hacen prácticas cada día. De momento, lo hemos pagado todo, pero sólo nos quedan 4.000 euros en la cuenta», explica. Pablo Sebastián, del Xarc, reconoce también que «están mal del dinero» al no recibir el tercer plazo del pago anual. Los centros recalcan que «no es resultado de una mala gestión», sino porque en el caso del Macabich están pendientes de recibir 33.800 euros. En el Algarb están pendientes de recibir 26.000 euros; el Quartò de Portmany, 30.000 euros; el Xarc, Sa Colomina y el Marc Ferrer, 25.000 euros cada uno; Sant Llorenç, 22.000 euros; Artes y Oficios, 18.000 euros.

La deuda de la Conselleria con los centros de secundaria de las Pitiüses asciende a 282.000 euros, aproximadamente 46 millones de las antiguas pesetas. La situación no se limita a las Pitiüses, sino que afecta a todos los centros educativos de Balears, incluidos los colegios de primaria. La única diferencia estriba en que los institutos se hacen cargo del mantenimiento, a cargo de Educació, mientras que en los colegios esa tarea corresponde a los ayuntamientos. El problema se agrava sobre en todo en los centros de secundaria más antiguos de Eivissa en los que el mantenimiento se lleva el 25% del presupuesto.