E.P./M.A.
La Asociación de Vecinos del barrio de ses Figueretes tramitó ayer una denuncia administrativa contra los gestores de la estación de bombeo que vertió al mar aguas residuales ayer y el pasado 29 de junio. Para el presidente de la agrupación vecinal, Bartolo Roig, los vertidos fecales tendrán una repercusión importante en el turismo de la zona, que siempre se ha caracterizado por la calidad de sus playas, y que debe valorarse no sólo de forma visual sino también mediática. Por ello, destacó que esta denuncia pretende paliar el pasotismo de la estación tras cometer reiteradamente un delito contra la salud pública.