L.F.A./EFE
La economía balear creció el segundo trimestre del año un 1'1 por ciento, dos décimas menos que el primero, lo que pone de manifiesto que la esperada recuperación no acaba de llegar, en gran parte por la «apatía» del sector servicios, que acusa «los síntomas de agotamiento» del producto turístico. Así lo manifestó ayer el director del Centro de Investigación Económica (CRE), Antoni Riera, en la presentación del último boletín coyuntural elaborado por este organismo de «Sa Nostra» y la UIB, en el que se refleja que el PIB balear creció en el primer trimestre un 1'3 por ciento, muy por debajo del español (+2'8 por ciento).

Para el segundo trimestre, el economista vaticinó una evolución positiva del 1'1 por ciento, por debajo del primero, lo que le obliga a replantear sus previsiones de pronta recuperación tras el periodo de desaceleración -y no crisis-, así como sus predicciones de crecimiento para el conjunto de 2004 del 2 por ciento. «Será difícil» alcanzar esa cifra y lo más probable es que se cierre el año con una evolución del PIB entre el 1'5 y el 2 por ciento, señaló Riera, quien, pese a instar a no mirar con alarma la bajada de dos décimas en el segundo trimestre, dejó claro que demuestra «que algo no va bien».

El sector servicios, con un crecimiento del 1 por ciento en el segundo trimestre (tres décimas por debajo de los tres meses anteriores) es el gran responsable de que la economía no salga de la ralentización. El número de pernoctaciones ha disminuido un 7'5 por ciento durante los cuatro primeros meses del año a pesar de aumentar el número de turistas (0'8 por ciento), lo cual pone de manifiesto que los visitantes que llegan optan cada vez más por alojamientos distintos a los hoteleros.

Turismo agotado
Las cifras también reflejan «síntomas de agotamiento del producto turístico» de Balears, añadió el economista del CRE, quien instó a tomar medidas al respecto para evitar mayores problemas en el futuro, sobre todo teniendo en cuenta la dura competencia de destinos como Turquía, con crecimientos de turistas del 40 por ciento. Riera no obvió que otra de las causas por el que el sector turístico no acaba de arrancar es que las economías de Alemania y Gran Bretaña, principales mercados emisores a Balears, tampoco despegan, y que la fortaleza del euro respecto al dólar o la subida del petróleo restan competitividad a Balears en precios.

El sector de la construcción es el único que «da señales de reactivación», con crecimientos del 1'6 y el 1'8 por ciento durante el primer y segundo trimestre, respectivamente, gracias a mejoras como la subida de proyectos visados (+0'5 por ciento, tras tres años de descenso). No obstante, recordó que éste es un «motor de corto recorrido», por lo que futuros crecimientos no pueden depender de esta actividad.

Por islas, la economía mallorquina es la que presenta una mayor actividad con un crecimiento del 1'1 por ciento. Sin embargo, en las Pitiüses hay varios indicadores que muestran una evolución negativa. Así, el número de pernoctaciones hoteleras hasta mayo cayó un 13 por ciento, a pesar de que la llegada de turistas por vía aérea aumentó un 7'5 por ciento, lo que confirma que los visitantes eligen cada vez menos establecimientos hoteleros para pernoctar. El consumo de energía eléctrica aumentó un 17'9 por ciento en las Pitiüses de enero a marzo, mientras que los proyectos visados por el Colegio de Ingenieros cayeron un 4'1 por ciento, una cifra que se ha recuperado en abril y mayo, según indicaron los colegiados de Eivissa en rueda de prensa anteayer.

El incremento en la llegada de turistas ha sido posible tanto por la recuperación del turismo alemán (con un aumento del 3'8 por ciento), como por el fuerte crecimiento del español, un 14'3 por ciento; mientras que el turismo británico cae un 6'1 por ciento, y el resto de nacionalidades, como los italianos y los franceses, sufren descensos del 53'2 por ciento y del 20'9 por ciento, respectivamente.

Según el informe, el incremento en las llegadas de turistas ha repercutido en una mejora de los márgenes empresariales, ya que el índice de ingresos hoteleros, que publica el INE ha registrado un incremento del 7'1 por ciento durante el primer cuatrimestre.

Por otra parte, el precio de la vivienda en Balears (1.779'9 euros por metro cuadrado) se incrementó un 10'3 por ciento anual durante el cuarto trimestre de 2003, el tercer menor aumento por comunidades autónomas y hasta siete puntos porcentuales por debajo de la media española. Los últimos datos disponibles por el Ministerio de Fomento correspondientes al primer trimestre, apuntan a un mantenimiento de la tendencia señalada ya que los precios han crecido a las islas cuatro puntos porcentruales menos que en el conjunto del Estado (13'1 por ciento interanual en Balears frente a un 17'2 por ciento en España).