L.F.A./R.L.
Ni los más de 1.000 metros cuadrados con los que cuenta el nuevo stand del Ibatur en la feria Fitur, ni el hecho de que el 50 por ciento de su superficie esté dedicada a Eivissa y Formentera han convencido a la comitiva del Ayuntamiento de Eivissa, compuesta por el alcalde, Xico Tarrés, y por Lurdes Costa, concejal de Cultura y Turismo. Los mostradores de las Pitiüses «son más pequeños que los de Mallorca y Menorca y están situados lejos de la cafetería, que es el centro de reunión, donde está todo mucho más animado», protestó Costa, que añadió que tanto ella, personalmente, como el conjunto de las islas «no pueden más que sentirse insultadas» por el trato «discriminatorio que han recibido por parte del Govern en la feria», que parece hecho «a propósito». Tanto el alcalde como la concejal protestaron porque «se ha dado espacio propio a actos como un campeonato de ajedrez, a un simulador de golf e incluso a Costa Nord, que no deja de ser un proyecto impulsado por Michael Douglas y comprado por el Govern, mientras que no se ha dado apenas espacio a la Eivissa Patrimonio de la Humanidad». En este sentido, Costa destacó que las fotografías que aparecen junto al mostrador de Eivissa son del puerto de Ciutadella y, además, las referencias al Patrimonio de la Humanidad de otra galería de fotografías son tan pequeñas que hay que acercarse para saber lo que son. «Este Govern no se siente orgulloso de que Eivissa sea Patrimonio de la Humanidad y no promociona tampoco bienes culturales o naturales con el interés que debería hacerlo, estamos muy enfadados», no dudó en afirmar la comitiva ibicenca. Las impresiones sobre el stand no fueron tampoco muy positivas por parte de los representantes de Formentera, que prefirieron no pronunciarse de manera abierta, aunque el malestar era más que notorio. Una opinión favorable sobre el stand fue la del presidente de los hoteleros, Pedro Matutes, que considera que la filosofía del nuevo stand, mucho más grande y abierto que el del año anterior, «es el correcto porque invita a entrar». Valoró también que se haya dado una gran parte del stand a Eivissa y Formentera, porque en otros años «las islas estaban encajonadas y poco diferenciadas de otros destinos de Balears». Por su parte, el presidente de Fomento del Turismo, Gonzalo Miragall, confesó que «esparaba más» porque el proyecto con el que él contaba no se corresponde exactamente con la realidad. Sin embargo, valoró de manera positiva el que las Pitiüses cuenten con más espacio.