Del mismo modo que una casa no es habitable hasta que muebles y elementos decorativos le dan vida, bancos, farolas, papeleras, árboles plantas darán en pocos días al paseo de dique de Botafoc ese toque humano que podrá, además, el punto final a las obras. Está previsto instalar de manera secuencial 27 bancos y papeleras circulares y, en lo que respecta a la iluminación del vial de acceso, se colocarán 42 farolas de un diseño especial -varias ya instaladas-. En el costado de la escollera, se ubicarán unos focos que servirán para dar un toque de iluminación decorativa al muro de protección que separa el mar del paseo.

Además se plantará vegetación (plantas y árboles) en varias zonas a lo largo del vial, que tiene una longitud de 1.200 metros transitables para personas y también un carril bici, que será de uso rodado restringido. Por otra parte, la finalización de las obras del espigón está próxima. Este paso está pendiente de la colocación de las últimas defensas que separarán la estructura de los barcos y de la pavimentación de la plataforma portuaria con un firme especial. El organismo portuario recuerda que el paseo se prolongará por todo el recorrido del vial de acceso, aportando a la ciudad una zona de esparcimiento, que aporta un valor añadido al dique propiamente dicho.