Imagen de un hotel de Sant Antoni.

EUGENIO RODRIGUEZ La Asociación de Alojamientos Turísticos de Sant Antoni pedirá al Govern balear, a través del conseller insular de Turismo, Josep Marí Ribes, Agustinet, que les exima este año del pago de la ecotasa dada la grave crisis que afecta al sector en esta zona. La baja ocupación que se está registrando en Sant Antoni hará que muchos hoteles, según el presidente de este colectivo de establecimientos, Francisco Vallespir, no alcancen el nivel de ocupación previsto en los módulos para el pago de la ecotasa.

Prácticamente todos los hoteleros de Sant Antoni se han decantado por este sistema para pagar el controvertido tributo ecológico, que establece una cantidad fija en función de las características del hotel, sea cual sea el balance final de ocupación de la temporada. «Tenemos que pagar, por ejemplo, la cantidad equivalente (1 euro por persona y día) a si tuviéramos un 52 por ciento de ocupación. Pero muchos establecimientos no alcanzarán el nivel fijado. Si la temporada resulta tan mala como este año, el pago de la ecotasa rebaja mucho más aún el margen de beneficio», explica.

«Lo que queremos es que la Conselleria de Turisme haga una especie de plan de choque para minimizar en lo posible el golpe que supone la caída de la actividad», dice. Francisco Vallespir recuerda que en septiembre los hoteleros tendrán que hacer frente al pago de la ecotasa.

La encuesta de ocupación de la Federación hotelera de las Pitiüses sitúa a Sant Antoni como la zona de la isla más castigada por la caída de la actividad turística. La ocupación registrada en la segunda quincena de junio fue del 73'6 por ciento, lo que supone una caída del 10 por ciento con respecto al año pasado.