Francis Montesinos había sido invitado al desfile Adlib. Foto: K.TABERNER

Francis Montesinos había sido invitado al desfile Adlib. Foto: K.TABERNER

G. Romaní02/07/02 0:00
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Las declaraciones que el diseñador valenciano Francis Montesinos hiciera sobre Adlib instantes después de pisar el muelle de Formentera, en las que acusaba de falta de profesionalidad y talento a los diseñadores del certamen, tuvieron un eco inmediato a lo largo de la comida que tuvo lugar poco después en es Molí de Sal. El conseller para Formentera, Santiago Ferrer, afirmaba ayer que invitó a Francis Montesinos «por quien es y lo que él ha dicho es pura y simplemente a título personal».Y aunque aseguró que no quería valorar sus declaraciones, afirmó que le parecía frívolo «que en tan poco tiempo como lleva aquí pueda valorar como lo ha hecho un sector tan importante como es el de la moda».

Eva Cardona una de las diseñadoras de Formentera que presentó su nueva colección en el desfile afirmaba ayer que «Montesinos va muy equivocado, realmente no sabe muy bien qué es la moda Adlib y no sé por qué hace declaraciones sobre algo que no es su tema y desconoce casi por completo» En este sentido, Eva Cardona aseguró opinar que el trabajo había estado muy bien hecho. «Estamos hablando de la moda que hacemos y llevamos en Eivissa y Formentera y es una moda que va por todo el mundo y cuando Montesinos dice que en los escaparates de todo el mundo está presente el blanco, es por algo», dijo Cardona, quien se mostraba enfadada por las palabras de Francis Montesinos pero afirmó que no quería «hacer mucho caso de sus declaraciones» y que consideraba que era una opinión equivocada que no hubiera tenido que hacer sin conocer realmente la moda Adlib. Finalmente la joven diseñadora se mostró muy contenta «por el éxito de los desfiles y por el trabajo hecho por los diseñadores y la respuesta del público».

Montesinos también había arremetido contra la organización y en ese aspecto, algún que otro diseñador o participante en los desfiles sí reconoció que hubo más de un fallo achacable a la organización, señalando aspectos de falta de coordinación o poca planificación que, de todas maneras, ni unos ni otros quisieron sacar de órbita.