La Conselleria d'Educació se encuentra con problemas de
escolarización para el próximo curso escolar. El delegado insular
de Educació, Antoni Marí, afirmó ayer que «se ha empezado a
detectar que se tendrán que poner en marcha algunas medidas
especiales en Sant Jordi, Sant Carles y Santa Eulària, donde se ha
detectado un mayor número de solicitudes».
Comisiones Obreras pidió ayer que la Conselleria d'Educació
declare a Eivissa como una zona escolar de intervención
prioritaria, una petición que hizo Antoni Marí en su toma de
posesión en 1999, ante el aumento espectacular de población que
influye en la educación. Según los datos de CC OO, facilitados por
Educació, los municipios de Eivissa, Sant Antoni y Santa Eulària
superan la ratio máxima que establece la Logse, 25 alumnos por
aula, y «se pueden encontrar muchas clases con 30 alumnos o más».
En cuanto a la matriculación tardía o extraordinaria, «en febrero
había 547 y ya se superan ampliamente las cifras totales de los
cursos pasados».
Según el sindicato, la Conselleria d'Educació «se limita a
aumentar de manera indefinida el número de alumnos por clase y
utilizar espacios obsoletos como el colegio de Sa Graduada o el
anexo del instituto Quartó de Portmany. «Dicen que no hay dinero
para más recursos ni para nuevas construcciones», señala y recuerda
que «esta Conselleria aumentó la subvención en los centros privados
concertados».
En cuanto a las obras pendientes de hacer, Marí recordó que «se
han hecho muchas cosas» y apuntó que la «gran dificultad» estriba
en que «hay muchos proyectos que se que quedan desiertos porque las
empresas no se presentan».
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