A pesar de que la fecha oficial del noveno aniversario de la residencia asistida de Cas Serres fue el pasado jueves la dirección eligió la jornada de ayer para celebrarlo. Una pareja de clowns y el ballet de la Casa Cultural Andaluza se encargaron de poner las notas de alegría a un recinto de enhorabuena. Las nueve velas se soplaron el jueves, así como el cántico del «Cumpleaños feliz». Pero el sábado por la tarde se erigió como el momento perfecto para dar rienda suelta a las carcajadas de los internos de la residencia. Un aniversario que también fue el pretexto para celebrar una misa solemne oficiada por el cura del recinto, don Toni.
Después de una merienda vespertina los mayores ocuparon sus asientos en la sala principal de la residencia para asistir al primero de los dos números. Dos payasas que se sumaron al aniversario voluntariamente sonrieron delante de cada uno de los asistentes al número y bailaron junto a ellos para hacerles olvidar la rutina del resto de días. Acto seguido, y sin tiempo para el descanso, un grupo de jóvenes pertenecientes al ballet de la Casa Cultural Andaluza saltaron al improvisado escenario para ofrecer durante 30 minutos un espectáculo de baile clásico y flamenco.
Mientras las notas de música española y el taconeo se apoderaron de la sala, las dos clown comenzaron un recorrido por las habitaciones de aquellas personas que no pudieron bajar a la planta primera. Y es que nadie podía sentirse ajeno a la celebración del cumpleaños. Al terminar los actos los mayores pudieron saborear un refrigerio compuesto a base de refrescos y orelletes. Un sustento con el que accedieron al lugar donde se iba a oficiar la misa. Allí el cura don Toni centró el sermón de la jornada en un «el tiempo pasa pero las personas y los edificios permanecen».
El párroco tuvo unas palabras de recuerdo para la señora Teresa, «una mujer inglesa que durante estos años se volcó en ayudar al que lo necesitaba, en escribir una carta al que no podía y en llamar por teléfono al que no sabía y que esta misma semana nos ha dejado». La residencia Reina Sofía toma el testigo el próximo día 17 con un festival en el salón de actos.
Los resultados de un taller para mayores sobre la primavera
Además de los actos que encabezaron ayer la celebración del noveno aniversario de la residencia asistida de Cas Serres los mayores del centro hicieron durante la semana unos murales representativos de la primavera. Orientados por la asistente social del hospital, Marilú, los residentes confeccionaron entre semana una interpretación particular de lo que para ellos es la primavera. Unos trabajos hechos a base de pegamento y bolitas de colores de papel estraza que reflejan flores, mariposas y naturaleza. Los murales se expondrán en el recinto hasta el próximo domingo en el recibidor.
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