El parque Marià Villangómez no está a salvo de los actos vandálicos. Las obras de esta zona verde han acumulado nuevos retrasos debido a que en los últimos días algún gamberro ha decidido pasar por la zona y dejar su huella en las farolas que habían comenzado a instalarse y en los árboles recién plantados.

La consellera de Medi Ambient del Consell, Fanny Tur, responsable del proyecto, explicó que es necesario hacer una valoración de los daños y reponer el material que ha sido estropeado antes de que los trabajos puedan continuar con toda normalidad.

«Las obras ya llevaban un par de semanas de retraso y el temporal todavía provocó algunos problemas más», comentó Fanny Tur, que aseguró que, en cualquier caso, el parque estará completamente terminado para la próxima primavera.

Estas obras tienen un presupuesto de diez millones de pesetas, aunque todavía falta por contratar el mobiliario, para lo que el Consell invertirá otros cinco millones. Según las explicaciones de la consellera, con este presupuesto se comprarán papeleras, bancos y los elementos de la zona infantil con la que contará el parque.