Antoni Mari Calbet y Pere Palau, miembros del grupo popular del
Consell Insular d'Eivissa y Formentera, valoraron ayer como «muy
positiva» la sentencia dictada el pasado martes, 12 de diciembre,
por el Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) en la que se
desestima el recurso interpuesto por El Verds contra el acuerdo de
la Comissió Insular d'Urbanisme (CIU), que establecía que no era
necesaria la declaración de utilidad pública para la construcción
de la planta desaladora de agua de mar del campo de golf de Cala
d'Hort.
El conseller Pere Palau considera que el dictamen confirma la
«legalidad» del proceso para declarar de interés social al
proyecto. Palau indicó que con esta sentencia «se refuerza más la
legalidad de todos los actos realizados, incluso la licencia que
otorgó el Ayuntamiento de Sant Josep». Para Palau, esta sentencia
puede tener como consecuencia que los promotores «pidan
indemnizaciones muy costosas, que al final no las paga el Consell,
las paga el pueblo».
El portavoz del PP en el Consell Insular, Antoni Marí Calbet,
recordó que el equipo de gobierno aprobó, con los votos en contra
del grupo popular, retirarse del caso abierto por el anterior
equipo del PP en el Consell. Este hecho suponía dar la razón a los
demandantes -Els Verds- anteponiendo «intereses particulares en el
tema». Marí Calbet criticó que esta decisión fue «un acto indigno e
impresentable» de la presidenta Pilar Costa, «realizado para
defender intereses particulares». El conseller recordó que los
políticos de la institución insular deben siempre «defender al
Consell»
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