M. HERRERA La comisión general del Pacte Progressista consideró ayer un «flagrante caso de transfuguismo político» el paso de la concejala Teresa Elías desde el grupo progresista del Ayuntamiento de Sant Joan al grupo mixto, tal y como esta concejala ha solicitado por estar en desacuerdo con las políticas que venía defendiendo el que hasta ahora era su grupo municipal. Según el Pacte, su decisión de cambiar de filas «no es ninguna sorpresa» ya que en los últimos meses se había convertido en una «tránsfuga de facto».

Los progresistas le reprochan a Elías que aceptara un cargo de confianza del alcalde de Sant Joan, Antoni Marí Marí, y que votara en contra de la Norma Cautelar de es Amunts aprobada por el Govern de les Illes Balears en enero. El Pacte afirma que la concejala ha vulnerado «principios éticos elementales exigibles a todo cargo público», además de considerar que se ha opuesto a medidas básicas incluidas en el programa electoral bajo las siglas del cual se presentó a las elecciones.

Por todo ello, la comisión general exige a esta concejala que renuncie a su escaño, como afirma que ya se le solicitó hace unos meses sin que Elías compareciera ni siquiera en una reunión a la que había sido citada para poder aclarar todo este asunto. «Sus excusas para justificar su paso al grupo mixto son totalmente pueriles e incoherentes ya que nos encontramos ante un caso de transfuguismo de manual». Finalmente, el Pacte quiere comunicar su total apoyo y solidaridad al concejal Antoni Marí Marí, Rota, «por su valentía y coherencia política al quedarse solo defendiendo un modelo urbanístico».