Los misioneros fueron recibidos ayer por la presidenta del Consell Insular, Pilar Costa. Foto: M.F.

«En Eivissa les sobra económicamente y allá nos falta todo. Es muy importante la ayuda que nos ha facilitado el gobierno balear. Se han hecho muchas obras que sin esa ayuda sería imposible». Este es el mensaje transmitido ayer por el misionero Vicente Planells, párroco de una zona al sur de San José en Costa Rica, quien asegura que su trabajo no se limita a predicar en el evangelio, «sino dar un trozo de pan social, atendiendo las situaciones que se presentan continuamente».

Planells recuerda el problema de los inmigrantes de Nicaragua: «Hay muchos nicaragüenses en Perú y eso, dentro de la pobreza, significa lo máximo de la pobreza. Están fuera de su casa, sin trabajo y sin dinero». Acompañado de las misioneras Esperanza Roig y Antonia Marí, que trabajan en programas de ayuda a la mujer en Perú, Planells fue recibido ayer por la presidenta del Consell Insular, Pilar Costa, y a la consellera de Benestar Social, Sofía Hernanz. Los misioneros ibicencos informaron a Costa y a Hernanz, de los trabajos realizados y de los proyectos previstos, algunos de ellos dentro del Fons Pitiús de Cooperació.