El presidente del Gobierno, José María Aznar, junto a su familia, embarcado en el yate del ministro ibicenco Abel Matutes. Foto: David Martínez

El presidente del Gobierno, José María Aznar, llegó ayer por la tarde a Eivissa acompañado de su esposa, Ana Botella, y sus dos hijos varones: José María y Alonso. Por la mañana, Aznar mantuvo una reunión con el nuevo monarca marroquí, Mohamed VI, en la que trataron temas sobre pesca.

El presidente se dirigió directamente al navío «Aiglion» tras tomar tierra. Este buque es propiedad del ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, con quien pasará unos días de descanso en la isla. En el navío le esperaba Matutes; unos minutos más tarde llegaron su esposa, Nieves, y su hijo menor, Abel.

La visita de Aznar a Eivissa estuvo acompañada de un amplio despliegue policial. Eso sí, en esta ocasión no iba a bordo del ya clásico monovolumen verde que acostumbra a conducir ni del Audi A6 blindado, sino de un Mercedes.

A las ocho menos cuarto, las dos familias partieron muy probablemente con destino a Formentera. Eso sí, antes de zarpar, el buque sufrió un ligero percance cuando otro navío casi le aborda mientras realizaba las maniobras de atraque. La cosa no fue a más. Aznar debió tener un viaje en barco bastante movido, a tenor del viento que soplaba que, incluso, echaba hacia atrás a la lancha de la Guardia Civil que les acompañaba.