El responsable del Centro de Información de los Trabajadores
Extranjeros (CITE), Mustafa Boul'Harrak, denunció ayer el escaso
interés del Consell Insular y de los ayuntamientos pitiusos «que no
tienen la mínima intención de intervenir en las cuestiones de
integración social». En concreto se refirió al Ayuntamiento de Sant
Antoni, donde residen unas 500 personas emigrantes. «No tienen ni
una ventanilla abierta para canalizar las ayudas», se quejó.
El departamento adscrito a CC OO dio a conocer ayer los datos
del contingente extranjero que ha aumentado en Eivissa. 2.652
expedientes de ofertas de trabajo se han tramitado, de los que 600
eran de Eivissa, pero muy pocas se han aceptado. La Administración
asignó 716 plazas para Balears.
Boul'Harrak denunció la actitud de la Policía «por cómo se
tramitan los expedientes de expulsión, ya que se aplica la Ley
Corcuera con la patada en la puerta». El comportamiento con este
contingente por parte de la Dirección Insular también fue puesto en
tela de juicio por el CITE. Aludió a «una funcionaria que atiende
en el registro de manera discriminada a los extranjeros». Los
trámites de permiso de trabajo se canalizan a través de la
Dirección Insular, ya que Trabajo cerró la oficina existente en
Eivissa. También lamentó «la política de la Dirección Insular que
no permite que los extranjeros traigan a sus familias a
Eivissa».
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