La consellera de Bienestar Social de Formentera, Cristina Costa, ha admitido finalmente este lunes que la residencia de mayores de la isla tiene algunas deficiencias, tal y como han denunciado algunas trabajadoras, familiares y usuarios del centro, así como el sindicado UGT, en los últimos días. Costa, sin embargo, ha dejado claro en todo momento que los usuarios de la residencia están «bien atendidos».
La consellera ha admitido que, tras tomar de nuevo posesión del cargo el pasado 27 de diciembre, ya le constaba que «el problema estaba». Y ha explicado que el origen del mismo es la decisión de la directora del centro, Carla Tur, de modificar el horario de trabajo de las auxiliares sociosanitarias «para que todos los usuarios estuvieran bien atendidos». «Hay momentos como la mañana o la comida en los que hacen falta refuerzos», ha reconocido la consellera, «porque dos trabajadoras no pueden atender a todos los usuarios. Es poca gente».
«Con la directora y el equipo técnico», ha añadido, «estábamos valorando a ver qué tipo de horario se podía hacer para adaptarnos a las necesidades». La consellera ha recordado que la residencia es de nivel 2-3, lo que quiere decir que hay usuarios que «necesitan bastante atención». Por eso ha justificado que el caso concreto de una usuaria que la que las auxiliares deben estar una hora por la mañana y otra por las tardes: «Hay que dar una atención muy personalizada y eso complica el trabajo».
Falta de personal
Costa ha reconocido que «falta personal». Sin embargo, no ha aclarado si el Consell tiene previsto o no contratar a más auxiliares. Según ha explicado, las auxiliares sociosanitarias del centro de día ayudan a reforzar la plantilla de la residencia, formada por 14 trabajadoras de esta categoría. Según Costa, las ratios fijan que, un centro como este, debería tener nueve auxiliares sociosanitarias y el de Formentera cuenta con 14 .
La consellera ha reconocido también que la residencia solo tiene en estos momentos una enfermera, que ha de atender a los 18 usuarios del centro. Ante esta situación, el Consell busca a otro profesional para completar la plantilla. El plazo de presentación de candidaturas concluye el próximo día 31.
Sobre el trabajo de esta enfermera, Costa ha explicado que está trabajando en diferentes turnos y que eso «no se puede sostener». Ha asegurado que ninguna sociosanitaria está llevando a cabo labores propias de la enfermera, pero, a la vez, ha indicado que sí que esta les ha entregado «unas pautas por escrito» porque, en determinadas situaciones, no es necesario que esté «presencialmente». «Imagina que para 18 usuarios tuviera que estar presencial», ha exclamado al ser preguntada por esta cuestión, «aquí ningún sociosanitario pone inyecciones o saca sangre. Lo máximo que hacen es lo de las gluecimias. Y está supervisado por la enfermera. No hacen ningún trabajo que no pueda hacer cualquiera en su casa con un mayor».
Noches con una trabajadora
Cristina Costa ha insistido en que «por ley, un auxiliar sociosanitario puede estar con 18 usuarios» para justificar que durante algunas noches los residentes hayan estado a cargo de una sola trabajadora. En este punto, la consellera ha lamentado que de la plantilla de 14 sociosanitarias cinco estén de baja. Y ha insistido en que hay tres trabajadoras más «de lo que toca».
La consellera Costa ha explicado también que la propuesta del Consell y de la dirección es que las sociosanitarias hagan jornadas de un máximo de 9,5 horas. Ellas, sin embargo, prefieren hacerlas de 12. Pero desde el Consell se considera que esto no es viable por la necesidad de contar con ellas para hacer refuerzos. Algo que ahora se soluciona trasladando a sociosanitarias del centro de día a la residencia.
Costa ha rechazado las acusaciones de posibles represalias apuntadas por las trabajadoras. «Ellas tienen ideas muy buenas», ha asegurado la consellera, que también ha señalado que espera que el problema pueda solucionarse en breve. Aunque también ha insinuado que, si aún no se ha llegado a un acuerdo, ha sido porque las trabajadoras han solicitado la presencia de un abogado en las negociaciones.
EL APUNTE
Sólo un calentador para la residencia y centro de día
Sobre el problema de la falta de agua caliente en uno de los módulos de la residencia, Costa explicó que todo depende del sistema de placas solares. Esto provoca que, a primera hora, no haya agua lo suficientemente caliente para que los usuarios puedan ducharse, por lo que se optó por «hacerles una higiene sin agua» hasta que la que sale por las duchas estuviera lo suficientemente caliente. «El problema es que se puso un solo calentador para la residencia y para el centro de día», concluyó Cristina Costa, «se tenía que haber cambiado cuando se abrió la residencia».
1 comentario
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Un bravo por Cristina Costa, que al menos lava un poco las declaraciones que hizo el Consell el otro día negando todos los problemas. Vivimos en una sociedad en la que las mentiras y las traiciones son lo normal para no tener que responder a responsabilidades. Se miente sobre las listas de espera y tardanza en emergencia, se miente sobre lo bien que va la ITV en invierno (5 meses de espera), se miente sobre el dinero que empleamos como país en conflictos bélicos, se miente sobre las energías alternativas para llevar una agenda llena de inversiones e intereses, se borran móviles, leches hasta hemos creído que una bala puede dar 5 o 6 vueltas en el aire en el asesinato de Kenedy. . ….. parece como que no se pudiera hacer nada sin mentiras. Y de cierto lo es, y como insistas mucho te meten un puro. Nadie quiere responsabilidades. Y supongo que no todos los políticos son así,?que sí, que se que es difícil, pero es que hay mentirosos políticos de cualquier nivel, solo hay que meditar un poco en las declaraciones de ahora en Davos y sus intenciones. Pero no hay que irse tan lejos. Ya sabemos que muchos de nuestros políticos en Congreso y Senado están ahí por listas, y crean puestos de trabajo donde los directores responsables “suponen” cuáles son sus funciones al ser preguntados. Ni el emérito Rey se libra. Los que ya llevamos unas cuantas vueltas al sol sabemos que no siempre hemos sido correctos, y que es imposible tirar la primera piedra ya que todos somos culpables de algo, o lo fuimos. Pero precisamente es insultante el nivel de descaro, soberbia y sinverguenceria de algunos que no quiere hacerse responsable de sus errores. Eso si, cobrar que no se olvide, aunque no sepamos dónde está el despacho. Y ya no nos pueden engañar tan fácilmente. Eso si, nos imponen leyes e impuestos y otras obligaciones que, cuando ellos no las cumplen, las intentan cambiar. Que sórdido está todo el ambiente político. En fin, vivamos, que ya es mucho. Pero si podemos, mintamos menos señoras y señores en puestos de responsabilidad. Están ahí porque confiamos en ustedes. Dejen ya tantos viajes y comilonas y trabajen y supervisen. Que eso les agradecerá la sociedad, aunque nunca llueva a gusto de todos.