La situación en Formentera con la huelga de basuras continuó sin novedad durante toda la jornada del sábado. En concreto, se mantuvo la recogida de residuos en el hospital, mientras que los servicios mínimos no iban a comenzar hasta la medianoche, según lo acordado previamente.
Desde el sindicato UGT, José Ramón Mateos lamentó ayer que, en todos estos días, nadie ha contactado con ellos a pesar de haber reclamado públicamente una indemnización por parte de la empresa y el Consell. En concreto, reclamarán 3.000 euros por trabajador en huelga y otros 3.000 para el sindicato.
«Nadie del Consell de Formentera ni de la oposición se ha puesto en contacto con nosotros y nos parece increíble», reconoció.
Recientemente, UGT Servicios Públicos consideró que existe una evidente falta de voluntad política para solucionar la situación, algo que para el sindicato se habría demostrado desde el principio con la vulneración de derechos fundamentales por parte del Consell de Formentera. La institución decretó unos servicios mínimos que después fueron anulados judicialmente.
«La huelga es un derecho y, lo peor, es que parece que estamos pidiendo mucho y son unos 50 euros por trabajador, el 4,5% aprobado en el convenio y que todavía no se está pagando. No se están pidiendo más cosas, sólo aquello que está firmado y que seguimos sin cobrar», insistieron desde UGT.
El sindicato denunció el viernes que un técnico de Medio Ambiente y la supervisora de Territorio habían estado cambiando bolsas de basura en las papeleras de una plaza. Al considerarlo «ilegal», UGT anunció que adoptará las medidas oportunas -también de tipo penal- y se refirió a lo sucedido como un acto de «esquirolaje».
«Creemos vergonzosa la situación y pedimos responsabilidades políticas a todos los niveles, así como la intervención por parte del Govern, visto que el Consell de Formentera no es capaz de reconocer la gravedad de la situación ni tiene voluntad política de buscar una solución», señalaron también desde UGT.
El sindicato recordó que el primer día de huelga propusieron al presidente del Consell, Llorenç Córdoba, volver a intentar una mediación en el TAMIB de Mallorca, aunque siguen a la espera de una respuesta.
El Consell se defiende
Desde el Consell de Formentera negaron las acusaciones vertidas por el sindicato UGT en relación de la retirada puntual de bolsas de basura por parte de personal de la institución durante estos días de huelga. Según precisaron desde el área de Gestión Ambiental, «lo único que se ha hecho es revisar las calles por donde debían transcurrir las procesiones en Sant Ferran y Sant Francesc».
Unas revisiones que «han propiciado el vaciado de alguna papelera sin intención de desvirtuar la huelga ni ningún otro acto que quiera considerarse en contra del derecho de estos trabajadores a reivindicarse», apuntó la consellera del área, Verónica Castelló, quien lamentó que el sindicato UGT les quiera culpar «de esquiroles por un hecho puntual».
Asimismo, Castelló se mostró «sorprendida» por las declaraciones de responsables de UGT en las que acusaban al Consell de no estar abierto a la negociación ni a volver a acudir al TAMIB, «órgano al que no se somete el Consell de Formentera ya que la reclamación de los trabajadores de recibir su subida salarial compete exclusivamente a la empresa Prezero».
En este sentido, Verónica Castelló insistió en que la huelga viene ocasionada por el incumplimiento por parte de la empresa del pago a sus trabajadores del aumento salarial previsto para este año 2024, según se recoge en el convenio colectivo firmado entre trabajadores y empresa. Dicho convenio dice textualmente: «Año 2024: incremento de los conceptos retributivos del 4,50%. Este incremento estará vinculado a la materialización de la nueva adjudicación de la contrata y a la revisión salarial del Consell».
En dicho convenio también se recoge «que previo a la realización de la huelga por los trabajadores, las partes deberán acudir al TAMIB (Tribunal de Arbitraje y Conciliación de las Islas Baleares)». Y así fue, las sesiones en el TAMIB se celebraron los días 14 y 21 de marzo, ambas sin llegar a acuerdo entre los trabajadores y la empresa. A pesar de que en estas sesiones sólo negocian las partes implicadas en el convenio (empresa y trabajadores), «al tratarse de un servicio público esencial el Consell Insular de Formentera participó en ellas, preocupado por la situación», según precisaron desde la institución insular.
Paralelamente, desde el anuncio de la huelga y convocatoria del TAMIB, la consellera de gestión ambiental y vicepresidenta primera del Consell de Formentera ha mantenido conversaciones con la empresa Prezero, con representantes de los trabajadores del servicio de limpieza y también con la directora general de Trabajo y Salud Laboral del Govern para contar con su asesoramiento en materia de trabajo, así como para mantenerla al corriente de las actuaciones, dada su competencia en la materia. Es más, en el Decreto de servicios mínimos aprobado por la corporación que se le ha remitido se pide a la Conselleria de Empresa, Empleo y Energía que abra las diligencias oportunas respecto al incumplimiento, por parte de la empresa, del convenio colectivo. «Por todo ello, compartimos con las declaraciones de UGT Servicios Públicos el hecho de que la Conselleria competente en Trabajo evalúe la situación de huelga ocasionada por incumplimiento de convenio», manifestó Castelló.
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Ahí tenían que estar los políticos donde están las bolsas de basura