Rafael Adobas y Raquel Ortiz. | Ayuntamiento de Sant Antoni

El próximo 21 de diciembre a las 19:30 h, la iglesia de Can Bonet se convertirá en el escenario del tercer concierto de ‘Ones de llum’, una serie de cinco actuaciones de música clásica con un espectáculo de video mapping creado específicamente para cada lugar. Este ciclo, organizado por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Sant Antoni de Portmany y producido por Eivissa Escènica, ofrece una experiencia única en la que se conjugan música y arte visual para realzar la atmósfera de los lugares más icónicos del municipio.

Para garantizar la seguridad y respetar el aforo de la Iglesia de Can Bonet, el Ayuntamiento de Sant Antoni informa el aforo para el concierto es limitado y las personas interesadas podrán recoger las entradas gratuitas 45 minutos antes del inicio del evento. Las entradas se distribuirán por orden de llegada, siguiendo la cola establecida, hasta agotar las localidades disponibles. La organización agradece la colaboración del público para hacer posible un evento seguro y agradable para todos.

En esta tercera cita, el público disfrutará del artista Rafael Adobas, quien presenta obras clave del repertorio para flauta sola, junto con versiones de canciones populares, himnos espirituales, villancicos y composiciones propias. Adobas, en esta ocasión, estará acompañado de la bailarina Raquel Ortiz, quien actuará en varias de las obras que se interpretarán. La flauta travesera, como centro de la velada, será acompañada por partes cantadas, danza, teatro, junto al piano.

En un entorno emblemático como la Iglesia de Can Bonet, Adobas expresa sus pasiones: la música clásica, la música tradicional navideña y popular, y la música espiritual. El programa incluirá piezas de creación propia junto con obras de J.S. Bach, Michael Jackson y Richard Beaudoin, entre otros.

El espectáculo visual, a cargo del artista Jesús de las Heras, ha sido diseñado específicamente para cada iglesia, adaptando las proyecciones de luz y video mapping a la arquitectura y el ambiente de cada espacio. La fusión entre música y efectos visuales permitirá a los asistentes disfrutar de un diálogo entre el sonido y la luz, creando una experiencia sensorial completa y transformando la iglesia de Can Bonet en un espacio de emociones y creatividad.