Lo reconozco. He sido una de las 160 personas que ha visualizado el último pleno del Ayuntamiento de Vila en Youtube. Ante la imposibilidad de acudir personalmente, y ante la necesidad de estar un poco informado de lo que ocurre en Ibiza, suelo visualizar todos los plenos municipales y también los plenarios del Consell d’Eivissa. Realmente los debates resultan muy interesantes porque se hablan de los temas que preocupan a los ciudadanos, más allá de los debates generales sobre política que, hoy por hoy, no tienen casi alcance.
Del último pleno destacaría la penosa intervención de Ruiz, no por el contenido, sino por sus formas. El propio Ruiz reconoce que lleva muy mal haber perdido las últimas elecciones. Lo entiendo y le comprendo desde el punto de vista personal, pero ya lleva algo más de un año en la oposición y ha pasado un tiempo prudencial para que trabaje para aquello que los ciudadanos han decidido pagarle un sueldo mensual: ser jefe de la oposición.
Tampoco entraré demasiado en que casi en todos los plenos se dedique a descalificar a este medio, pero quizás habría que recordarle que presentó varias demandas contra Periódico y no ganó ni una vez. Como todo el mundo sabe, de poco le sirvió tampoco el uso de las redes sociales para intentar coaccionar a los periodistas de este medio por publicar noticias veraces mientras él pagaba programas de radios para promocionar el caos que provocaron las obras de Isidor Macabich.
En esta nueva etapa del PSOE, con Vicent Roselló al frente, me da la sensación de que Ruiz se ha convertido en un lastre para intentar cambiar la imagen de los socialistas, que están sumidos en el pozo, sin propuestas novedosas y sin plantear un nuevo discurso más razonable y próximo a los ciudadanos de Vila. Teniendo en cuenta que las políticas de Sánchez pueden empeorar aún más las perspectivas electorales del PSOE, Roselló tiene un grave problema con la oposición que supuestamente lidera Ruiz. Decía Ruiz, por supuesto refiriéndose a este periódico, que «cierta prensa no se entera ni se enterará nunca». Quizás habría que recordarle todas las exclusivas sobre la lamentable gestión municipal publicadas durante un año y medio, desde el ‘caso Nascor’ al antiguo centro de artesanía que Ruiz cedió gratis a amiguetes constructores para convertirlo en un almacén de material de obra.
No entraré en valorar si Ruiz debe seguir como portavoz después de que la jueza del ‘caso Puertos’ solicite que sea juzgado, ni tampoco si la petición de tres años de cárcel le inhabilita para seguir en el cargo, pero me da la sensación de que el exalcalde de Vila está totalmente desubicado, desnortado y que ni siquiera lidera a su propio grupo municipal. Tiene demasiado rencor acumulado y no ha hecho autocrítica para analizar los motivos por los cuales los ciudadanos le enviaron de forma contundente a la oposición.
Hombre, escuchar a Ruiz hablar sobre democracia y respeto es para troncharse de risa, sobre todo cuando se refiere a este periódico como pseudomedio o panfleto sin venir a cuento. Por cierto, este supuesto panfleto fue el que publicó en exclusiva gran parte del sumario del ‘caso Puertos’ , las conversaciones de Ruiz incluidas, mientras los medios que él considera serios miraban conscientemente para otro lado. Por lo tanto, el PSOE tiene ahora mismo un portavoz ‘fake’ sin ningún tipo de futuro. Haría bien su amiga Elena López en sustituirlo por otro concejal del grupo municipal porque, de lo contrario, el desastre que sufrirá el PSOE en Vila dentro de tres años puede ser histórico.