Las elecciones del pasado domingo en Balears tuvieron un desenlace que pocos se podían imaginar. El PP perdió esa noche todas las instituciones en las que gobernaba: Govern, Consell de Eivissa y Ajuntament de Palma. En cada caso, la obtención de un escaño más ha significado la pérdida de la mayoría absoluta y ha puesto las cosas muy difíciles para el PP, que hizo una apuesta muy arriesgada: o mayoría absoluta o nada. Y lo que es peor, una estrategia agresiva contra su socio natural, UM. La implicación del PP en una dura campaña mediática contra UM ha abierta una herida difícilmente curable.

El electorado sabía cuál era la petición del PP: la mayoría absoluta. Y no se ha dado ni en Balears, ni en Mallorca, ni en Palma. Ante esta situación, que no es nueva en las Islas, sólo queda la opción de los pactos. Lo dijo el propio Matas la misma noche electoral. Unos pactos que necesariamente pasan por UM porque el otro pacto teóricamente posible, PP-PSOE, es inviable.

De nuevo UM puede inclinar la balanza hacia un lado u otro. Hacia el PP, permitiendo que gobierne de nuevo pero quizá de otra manera. O con el PSOE y el Bloc, reeditando un nuevo Pacte de Progrés. Ambas opciones tienen sus pros y contras.

El PP sabe que en su oferta a UM no puede llegar muy lejos. Sus bases, las que se han encargado de crispar contra UM, no aceptarían unas cesiones que podrían considerar excesivas. Y en la propia militancia de UM hay poca predisposición a que sigan gobernando quienes han pretendido eliminarles. No obstante, el PP tiene una carta a su favor: su apoyo a UM en el Consell durante los últimos cuatro años.

El PSOE, por su parte, ya ha adelantado algunas líneas de su oferta, que parece bastante razonable. El problema para los nacionalistas podría ser la actitud del Bloc durante los próximos cuatro años. Si se garantiza estabilidad y no se cometen los errores de la legislatura 1999-2003 el pacto sería posible.

Sea lo que sea, lo importante es que se establezcan pactos con seny y pensando en la gobernabilidad de las instituciones.