EditorialIbiza23/06/22 3:59
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El Área de Salud de Ibiza y Formentera ha derivado a la sanidad privada, desde que se adjudicara a la Policlínica Nuestra Señora del Rosario el contrato de servicio de asistencia, a más de 2.600 personas, como informó ayer este periódico. En total, 846 pacientes para la realización de pruebas radiológicas (ecografías y resonancias magnéticas) y 1.761 a Traumatología se han desviado a la sanidad privada. Dicho contrato persigue normalizar la asistencia sanitaria en Can Misses y evitar, sobre todo, que los pacientes superen los plazos legales establecidos para pasar por un quirófano.

Aliviar las listas

Gracias a este convenio con la sanidad privada el sistema público sanitario pitiuso puede reducir listas de espera y evitar el colapso. Durante los últimos años se ha demostrado que invertir mucho más dinero no siempre es una garantía de efectividad, pero en Ibiza y Formentera, además, existe el problema de la falta de médicos por la falta de vivienda o el coste de la vida. El apoyo de la sanidad privada ha supuesto reducir en un 16% las listas de espera en las Pitiusas.

La importancia de la sanidad privada

Que el Servei de Salut de Ibiza y Formentera haya recurrido a la sanidad privada a través de un convenio de 14 millones es una decisión que confirma que hoy por hoy el sistema público no es capaz de atender toda la demanda que requiere la población pitiusa. De la misma manera que el sistema educativo colapsaría sin el respaldo de los colegios privados o concertados, imprescindibles ahora mismo para garantizar la educación a todos los niños en edad escolar. La situación que se vive en la sanidad, al igual que en la educación, demuestra la necesidad de recurrir en ocasiones a empresarios privados que conocen perfectamente su ámbito de actuación y tienen instrumentos para garantizar una atención óptima y mucho más rentable. Por eso debería evitarse en el futuro lanzar mensajes que demonizan todo lo privado simplemente por cuestiones ideológicas. Porque se ha demostrado que al final lo privado resuelve los graves problemas de lo público.