Este periódico ha ido informando en los últimos días sobre la modificación aprobada por Demarcación de Costas en Talamanca que permite la construcción de una mansión de más de 500 metros cuadrados. De todo lo sabido sorprenden dos cosas: una, que se permita modificar el deslinde en este caso y no para otros solares vecinos. En segundo lugar, la rapidez con la que el Ayuntamiento de Vila dio el visto bueno a la propuesta de Costas. En apenas dos meses el gobierno municipal de Rafa Ruiz autorizó el proyecto. Y además lo hizo en plena pandemia con una administración que funcionaba al ralentí.

Un pelotazo

La modificación del deslinde aprobada por el Ayuntamiento de Vila supone un gran negocio para sus propietarios, una promotora con sede en Barcelona. La publicidad de dicho solar difundida a través de un portal inmobiliario confirmaban un beneficio para los promotores de 4,5 millones de euros solo por el solar. El posible comprador debería destinar una importante cantidad económica para construir la mansión, unos precios solo al alcance de millonarios.

Se estrecha el círculo

En la edición de este domingo aportamos nuevos datos sobre el pelotazo de Talamanca. La promotora contrató los servicios legales del despacho de Josep María Costa y Julián Aguilar, ambos militantes socialistas. Aguilar es el marido de Pilar Costa, portavoz socialista en el Parlament. Con esta información el alcalde de Vila o alguno de sus concejales deberían informar cuánto tiempo se tarda habitualmente en tomar una decisión sobre peticiones urbanísticas similares al pelotazo de Talamanca. Y por último si hubo algún tipo de negociación entre Aguilar y miembros del gobierno municipal de Vila sobre esta modificación de deslinde que aceleraron la tramitación. Ruiz no puede seguir silenciando este caso. Y, sobre todo, los vecinos de Talamanca se merecen una respuesta convincente.