El conductor del vehículo implicado en el accidente acaecido el pasado lunes día 5 en Formentera, que costó la vida a dos jóvenes ocupantes de una motocicleta, ha ingresado preventivamente en el Centro Penitenciario de Ibiza por orden del juez de guardia. Recordemos que, supuestamente, el turismo Citroen Xsara que él conducía en la madrugada del domingo al lunes, arrolló a la moto causando la muerte a sus dos ocupantes. Al ser sometido a las pruebas de detección de alcohol, superó el límite legal establecido. Se trataría, así pues, de otro trágico y luctuoso siniestro que ha costado la vida a dos personas en las carreteras de las Pitiusas ocasionado, presuntamente, por una persona que conducía bajo la influencia del alcohol.
Once víctimas en 2019.
Este año y tras el siniestro de ayer en Sant Antoni, ya son once las víctimas mortales en las carreteras de Ibiza y Formentera, ocho de las cuales viajaban en vehículos de dos ruedas. Los motociclistas son, al igual que los peatones, los elementos más frágiles y por tanto, quienes más gravemente sufren las consecuencias de la siniestralidad vial. Sin embargo, se echan en falta por parte de las autoridades competentes actuaciones concretas para atajar estos casos dramáticos. Es preciso incrementar la presencia de patrullas de la Guardia Civil de Tráfico y de Policía Local en las vías con más tránsito y concentración de accidentes, así como intensificar los controles preventivos de alcoholemia y drogas. Igualmente se hace necesario que las administraciones titulares de las vías acometan planes de mejoras, algo que se echa en falta desde hace tiempo.
Campañas de concienciación.
También sería muy útil insistir en las campañas de concienciación dirigidas a conductores en general, para que asuman el gran peligro que supone tomar los mandos de un vehículo habiendo bebido alcohol o ingerido sustancias estupefacientes. Porque son muy necesarias las actuaciones severas y contundentes por parte de la Justicia para reprimir estos comportamientos tan peligrosos, pero las actuaciones preventivas para evitar la proliferación de delitos contra la seguridad vial son igualmente imprescindibles.