La Guardia Civil localizó ayer una patera en Cala Salada con dos tripulantes a bordo, de nacionalidad argelina, si bien se cree que había otras dos personas que se encuentran en paradero desconocido. Se trata de una nueva patera que llega a las costas pitusas en plena polémica sobre la gestión que está realizando el Gobierno de Pedro Sánchez de la avalancha de inmigrantes ilegales que quieren llegar a España.

El problema de la inmigración ilegal está alcanzando un punto preocupante por la incapacidad de Europa de dar una solución conjunta y, sobre todo, de un Pedro Sánchez que ya ha empezado a darse cuenta del alcance de su política errática, creando muchas expectativas a los ciudadanos no comunitarios que quieren llegar a Europa.

Solución al Aquarius

La llegada de una nueva patera a la costa ibicenca se ha producido el mismo día que el Gobierno de Sánchez ha alcanzado un acuerdo con otros seis países de la Unión Europea para repartirse los 141 inmigrantes rescatados del Aquarius. España acogerá 60 inmigrantes y todos ellos irán a Cataluña tras el ofrecimiento realizado por la Generalitat, cuyo gobierno también ha decidido utilizar esta crisis humanitaria para hacer política y poner en evidencia al Gobierno de Sánchez.

Sea como sea, siguen llegando inmigrantes a España y no parece que el país esté preparado para acoger a tantas personas que huyen de sus países en busca de un mundo mejor, como han advertido algunos responsables políticos.

Efecto llamada

Pedro Sánchez presumía en Twitter de haber logrado un acuerdo pionero con otros seis países para distribuir la acogida de las personas del Aquarius, evidenciando una vez más que el nuevo presidente busca sacar algún rédito electoral a su política migratoria.

Si bien es indiscutible que hay que actuar en materia humanitaria, ¿puede España asumir tanto protagonismo en la acogida de los inmigrantes? ¿Ha calibrado el Gobierno de Sánchez los medios que tiene a su alcance para acoger a estas personas? Y lo más importante: ¿tiene España capacidad ilimitada para recibir inmigrantes? No parece que así sea sino, más bien, de una estrategia política que ni el propio Sánchez saber cómo resolver. Una auténtica irresponsabilidad.