Operación lógica.
Cuando trascendió que s'Espalmador estaba en venta, hace aproximadamente un año, no hubo ninguna administración que diese un paso adelante. Ni siquiera con la caja que se conseguirá este año con la ‘ecotasa', unos 120 millones, el Govern de Francina Armengol se planteó la compra de este islote, situado en un espacio protegido y de gran valor medioambiental. Sin embargo, no ha habido el más mínimo interés por parte de los actuales dirigentes políticos de adquirir s'Espalmador. Y, en cambio, una familia de Luxemburgo sí ha mostrado interés y ha abonado los 18 millones de euros que costaba el islote. Parece una operación lógica, con sentido común, y que no debe sorprender a nadie.
Dinero público.
El dinero que gestionan las administraciones no debe servir para adquirir zonas que ya de por sí están protegidas por la legislación mediambiental. Por la misma regla de tres debería comprarse Es Vedrá o Tagomago, por citar dos ejemplos. Las administraciones deben velar por el cumplimiento de todas las normativas medioambientales, pero los recursos públicos tienen que utilizarse para otras materias y urgencias. Que un espacio natural esté en manos públicas tampoco garantiza un éxito de gestión. Por eso hay que mantenerse vigilantes con s'Espalmador, independientemente de quién sean los propietarios y que estos comprendan la importancia y el simbolismo que tiene el islote para los habitantes de Formentera.
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