Los esfuerzos de la cúpula del Partido Popular por ofrecer una imagen distinta, alejada de los excesos que vinculan su formación a la corrupción, quedan neutralizados por los comportamientos personales de algunos de sus representantes en el Gobierno, en este caso el titular del Ministerio de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis. El ministro y su familia no han dudado en alojarse como invitados en la Embajada de España en Ecuador con todos los gastos pagados, haciendo incluso uso de vehículos oficiales, a pesar de tratarse –como ha tenido que admitir el propio Ministerio– de una visita privada. Otro caso más de imperdonable confusión entre lo público y lo privado, en esta ocasión por un ministro que contradice los postulados que en materia de austeridad repite una y otra vez el presidente Rajoy.
EDITORIAL
Dastis no distingue entre un hotel y una embajada
16/08/17 4:01
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1 comentario
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Después de leerles está claro que si yo fuera Ministro lo primero que haría antes de iniciar un viaje de vacaciones, me imagino que me concederían ese derecho, sería preguntarles a ustedes que país es seguro para que un ministro de cualquier país europeo pueda pasearse libremente. Además me imagino que ustedes le concederán el derecho a un embajador o cargo público que tenga residencia oficial a invitar a sus amigos o familiares, salvo si es Ministro, parece. Pero a lo mejor lo que pretenden es que si ese embajador o cargo público invita a un amigo se desplace él mismo también a un hotel para poder compartir su compañía. Sorprende que no tengan otra cosa de mayor interés de que ocuparse y quedo suyo, estupefacto.