La semana que acaba ha sido muy negativa para algunos políticos de Eivissa. La más tocada políticamente ha sido Viviana de Sans, vicepresidenta del Consell, que presentó el jueves el intento de consulta que se saldó con una pírrica participación de 183 personas quienes, de forma telemática, expresaron su opinión sobre la reforma de la carretera de Santa Eulària. Las 183 personas que votaron no son muchas más de las que lo hicieron en las distintas reuniones celebradas entre vecinos afectados más directamente con la reforma. Viviana de Sans ha conseguido un hito en la política. No ha conseguido que ni los militantes de su partido, Podemos, se hayan interesado por la votación, pero lo más increíble es que haya dado la culpa del fracaso al PP, que desde el primer momento dijo que esta consulta era un paripé porque, simplemente, no sería vinculante y las obras no pueden demorarse más tiempo.
EDITORIAL
Chapuzas imperdonables en las instituciones
Eivissa21/02/16 0:00
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