La queja del cliente vino porque no le atendieron 16 minutos antes de cerrar, por lo que decidido dejó su opinión en una página de reseñas: «Ayer estuve con mi mujer a las 23:24 para tomar unas tapas y me dijeron que no me sentara porque la cocina cerraba a las 00:00. Me tuve que ir, que les vaya bien… Sobrados».
«La cocina la cerramos a las 23:30 y eso no le permite venir a las 23:24 a comer. No es que vayamos de sobrados, es que no voy a permitir que vengas seis minutos antes a comer a mi restaurante y tener a una plantilla de 15 personas que se vayan más tarde por tu culpa y por no venir antes como cualquier persona», le respondió el dueño del establecimiento, quien continuó explicando lo siguiente: «Nuestro bodegón está abierto de 8.30 a 0.00, y si te sentamos a comer a las 23.24 mientras se te atiende la bebida y luego decides lo que vas a comer y haces tu pedido... entonces todos nos quedamos trabajando hasta la 1:00 como mínimo... y eso no lo consiento».
Además, sentenció que no se trata de ‘ir de sobrados'. Comentó que está cansado de que muchos no tengan en cuenta el trabajo de gastronomía y que hagan esclavos a los empleados.«Ve antes a comer a los restaurantes», concluyó.
El mismo propietario, en una entrevista para El Ideal, subrayó que no es algo nuevo las críticas, pero lamentó que aquellas que se hacen de forma injusta afectan a su negocio, pues muchos turistas ojean las opiniones antes de acudir al lugar. El dueño aclaró que no acostumbra a contestar las críticas, pero hizo una excepción porque percibió el comentario como absurdo, puesto que no se sentó a comer tampoco.
«Siempre me he preguntado eso, ¿por qué ponen que la cocina está abierta hasta cierta hora si en realidad la cierran antes? ¿Por qué no ponen que cierra a las 23:15 si no van a tomar pedidos diez minutos antes de cerrar? Si un banco hiciera eso lo multan», «Si consideran que a las 00.00 el cliente no va a poder terminar de cenar, con avisarles al atenderles de que el restaurante cierra a esa hora y han de haber acabado en ese momento, pues el cliente ya decidirá qué hacer», «Es que no compensa. Una mesa, por mucho que gaste, con tener a un montón de empleados saliendo más tarde y cobrando horas extras», son algunos de los comentarios que se dejan ver en la publicación.
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