Las infecciones de orina pueden llegar a ser muy incómodas. | Foto de Polina Zimmerman

La infección de orina (IVU, por su siglas de infección de las vías urinarias) se trata de una infección del tracto urinario. Esta puede ocurrir en varios puntos, concretamente en la vejiga (cistitis), en los riñones (infección renal), úreteres (los conductos que llevan la orina desde cada riñón), y la uretra (se infecta el conducto que lleva la orina de la vejiga al exterior).

Según explica el portal de salud MedlinePlus, las causas de esta infeción pueden darse por bacterias que entran a la uretra y luego a la vegija. «La infección se desarrolla con mayor frecuencia en la vejiga, pero puede propagarse a los riñones. La mayoría de las veces, el cuerpo puede librarse de estas bacterias. Sin embargo, ciertas afecciones aumentan el riesgo de padecer IVU», detallan.

Esta afección suele ser más frecuente en mujeres que en hombre porque la uretra es más corta y se localiza más cerca del ano. Es por ello por lo que tras la actividad sexual o al usar un diafragma para controlar la natalidad, según el mismo portal, se pueden dar con frecuencia. Además, en la menopausia también es posible que se dé. Otra de las causas por las que puede desarrollarse es por diabetes, edad avanzada, cálculos renales, incontinencia intestinal, problemas para vaciar la vejiga completamente o el embarazo, entre otras.

Los síntomas de esta infección son diversos. Alguno de los indicativos puede ser: Orina turbia o con sangre o con olor fuerte; fiebre baja; dolor o ardor al orinar; presión o calambres en la parte inferior del abdomen o espalda baja, y fuerte necesidad de orinar con frecuencia, incluso poco después de haber vaciado la vejiga.

En caso de que la infección se propague a los riñones, según el portal citado, los síntomas pueden ser: escalofríos, temblores o sudoración nocturna; fatiga y sensación de indisposición general; fiebre por encima de los 38.3 grados; dolor de costado, espalda o ingle; piel enrojecida o caliente; confusión; náuseas y vómitos, y en algunas ocasiones dolor abdominal intenso.

Beber mucha agua y no esperar muchas horas a ir al baño para orinar son algunas de las formas para evitar las IVU.

Si se tiene la sensación de que se está sufriendo una infección de orina, lo mejor es acudir lo antes posible al médico.