¿Sabes lo que quiero para cenar esta noche? A ti…

Querida lectora,

Hoy te traigo una historia digna de un capítulo en Los Bridgerton o quizás de una comedia romántica con final inesperado. Déjame contarte como Nuria, inspirada por el último número de Telva y sus consejos para mejorar la libido, decidió embarcarse en un viaje lleno de promesas de pasión para recuperar la chispa en su relación.

Nuria había notado que las llamas con Paco ya no ardían como antes. Como tantas otras mujeres, sentía que su libido había decidido tomarse unas largas vacaciones, y no estaba dispuesta a dejar que se quedara en la playa sin ella. Encontró un artículo titulado «Recupera la pasión en tu relación», con consejos de expertos. ¡Parecía tan sencillo! Así que, sin pensarlo dos veces, Nuria planeó un viaje romántico con Paco para poner en práctica aquellas recomendaciones.

Día 1: Las velas y el ambiente perfecto

Nuria comenzó con el consejo de crear un «ambiente sensual»: velas, música suave y una lista de frases de seducción de internet. La primera noche, mientras Paco se arreglaba en el baño, ella preparó todo y practicó su mejor voz seductora. Cuando Paco salió y la vio rodeada de velas, preguntó, desconcertado:

—«¿Qué haces? ¿Estás invocando algo?»

Nuria, intentando no reír, le respondió con una frase que había ensayado:

—«¿Sabes lo que quiero para cenar esta noche? A ti…»
Paco no sabía si tomárselo en serio o reír, así que, entre risas, dejaron la seducción para después y cenaron en el restaurante.

Día 2: La sesión de masaje «romántico»

Al día siguiente, Nuria compró un aceite para un masaje en pareja, pero el aceite resultó tan resbaladizo que ambos terminaban deslizándose por la cama. En medio del caos, Paco bromeó:

—«¿Espera, estás segura de que esto no es aceite para motores de coche?»
El «masaje sensual» acabó siendo un desastre cómico, pero las risas hicieron de este día uno de los momentos más memorables del viaje.

Día 3: Alimentación afrodisíaca… solo para estómagos exquisitos

Siguiendo los consejos sobre alimentos afrodisíacos, Nuria ordenó ostras y platos especiados. Paco, que nunca había probado ostras, accedió a probarlas, pero pronto descubrieron que era intolerante. La «noche romántica» acabó en el baño, y Paco juró no volver a tocarlas. Nuria le preparó una manzanilla, y ambos se quedaron dormidos entre bromas sobre la «peligrosidad» de los afrodisíacos.

Día 4: Lo que importa de verdad

En la última noche, dejaron a un lado los trucos y simplemente disfrutaron del momento. Sentados en la terraza, recordaron sus primeras citas y se rieron de todas las «estrategias» que intentaron durante el viaje. Paco, con una sonrisa llena de cariño, le dijo:

—«Nuria, no te preocupes. Sé qué estás pasando por un momento complicado, y aunque a veces parezca que no me doy cuenta, quiero que sepas que siempre voy a estar aquí, apoyándote. Con o sin deseo, lo único que importa es que estemos juntos en esto.»
¡Guau! No sé tú, pero yo quiero un Paco en mi vida.

A veces, no hace falta una chispa ardiente, sino momentos de conexión genuina y el apoyo de quien tienes al lado para recordar por qué elegiste estar con él.

Los estrógenos y la libido

El cambio hormonal que trae la menopausia no tiene que verse como el fin del deseo, sino como una oportunidad para redescubrir y nutrir nuestra conexión con nosotras mismas. Como bien dice Nuria entre risas, «si mi libido está de huelga, ¡le daré mejores condiciones para que vuelva al trabajo!». Con el enfoque y los cuidados adecuados, es posible vivir esta etapa con dignidad y satisfacción, aceptando los cambios en el deseo y adaptándonos a ellos con nuevas formas de conectar y sentirnos bien en nuestra piel.

Tu guía para apoyar la salud íntima y mejorar la libido

Mantén la hidratación vaginal

Utiliza humectantes vaginales para el día a día y lubricantes a base de agua o silicona en momentos íntimos, que ayudan a reducir la sequedad y la incomodidad.

Explora opciones de terapia hormonal

Consulta con un profesional sobre la posibilidad de usar estrógenos locales (cremas o supositorios vaginales) o terapia hormonal de reemplazo para mejorar el flujo sanguíneo y la lubricación.

Cuida tu microbiota vaginal

Incorpora probióticos específicos para la salud íntima, que ayudan a mantener el equilibrio y reducir el riesgo de infecciones vaginales.

Prueba alimentos y suplementos naturales

Agrega alimentos ricos en fitoestrógenos (como linaza, tofu y soja) y consulta sobre suplementos como maca o ginseng, que pueden tener efectos positivos sobre el deseo sexual.

Mantén una rutina de ejercicio físico

El ejercicio regular mejora la circulación y los niveles de energía, además de aumentar tu autoestima, factores que pueden influir positivamente en la libido.

Crea un ambiente íntimo, sin presiones

En lugar de enfocarte en el «resultado» de la intimidad, dedica tiempo a redescubrir el placer en la cercanía y el contacto con tu pareja, sin expectativas.

Practica técnicas de relajación y autocuidado

Estrategias como el yoga, la meditación y la respiración profunda ayudan a reducir el estrés, un factor que puede inhibir la libido.

Mi consejo como experta en suplementos

Si estás buscando un impulso extra para recuperar tu vitalidad y deseo durante la menopausia, aquí tienes algunos suplementos efectivos para apoyar la libido y mejorar la salud íntima:

Maca: Esta raíz andina es fantástica para equilibrar las hormonas y aumentar la energía. Ideal si sientes que necesitas ese empujón para redescubrir tu vitalidad.

Damiana: Con su tradición como afrodisíaco, ayuda a reducir el estrés y mejora el bienestar emocional, creando un ambiente favorable para el deseo.

Ashwagandha: Un excelente adaptógeno que equilibra el sistema nervioso y reduce el cortisol, ayudando a que te sientas más relajada y receptiva.

Ginseng: Conocido por aumentar la circulación y la energía, el ginseng es útil para mejorar la respuesta sexual y la sensibilidad.

Tribulus Terrestris: Este suplemento natural contribuye al equilibrio hormonal y ha mostrado beneficios para aumentar la libido femenina.

Omega-3: Son antiinflamatorios, ayudan en la producción hormonal y mejoran la circulación, elementos esenciales para la salud íntima.

L-Arginina: Este aminoácido favorece la dilatación de los vasos sanguíneos, lo que puede aumentar la sensibilidad en la zona íntima.

Zinc y Magnesio: Ambos minerales son esenciales para el equilibrio hormonal y la función nerviosa. El zinc apoya la producción de testosterona, mientras que el magnesio reduce el estrés.
Para una suplementación personalizada con las mejores marcas avaladas por la ciencia, puedes enviarme un email a hola@mariajulve.com y te ayudaré.

Y recuerda: «Esta es tu oportunidad para cuidar de ti y comenzar a llenar tu hucha de salud día a día.» ¡Si quieres que todo siga como a los 40, tienes que empezar a cambiar las cosas! A los 40, pero también a los 50 y 60, empieza a ahorrar en salud. Será la mejor inversión de tu vida.

¡Cuidando de Ti, de dentro hacia fuera!