Investigada una empresa de España que obligaba a camioneros a trabajar con tacógrafos manipulados

Lo ha dicho durante una rueda de prensa en la Conselleria de Interior para presentar el balance de siniestralidad del año 2022 junto al jefe del Servei Català de Trànsit (SCT), Ramon Lamiel, y ha añadido que, durante este miércoles, Mossos y Guardia Civil han iniciado un dispositivo en Valencia y Andalucía contra esta empresa.

Ha explicado que, durante el mes de abril, los agentes de la Unidad de Tráfico de la policía catalana detectaron un vehículo que iba conducido por una persona que tenía el tacógrafo manipulado «para doblar el número de horas de conducción».

«Normalmente, estos trabajadores pueden conducir 9 o 10 horas, si el mismo conductor dispone de tarjetas de otros conductores, a no ser que se le detenga en algún control es imposible saber cuántas horas de conducción ha hecho», ha añadido.

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González ha manifestado que el cansancio es una de las causas de accidentalidad que más les preocupa, ya que «algunas personas ponen en riesgo a todos y provocan una competencia desleal con otras empresas del sector».

Al ver que el intercambio de tarjetas de conducción era una práctica habitual en Catalunya, montaron un equipo conjunto con la Guardia Urbana de Barcelona y empezaron a investigar esta empresa, en la que los conductores duraban muy poco trabajando allí y «donde los agentes pensaron que podía haber precariedad dentro de la empresa».

Como consecuencia, según ha podido saber Europa Press, se están haciendo entradas en Estepona, en La Línea de la Concepción y en la ciudad de Valencia, donde se encuentra la empresa en cuestión y el taller que «alteraba los tacógrafos».

Durante los registros, 15 personas han resultado investigadas --aunque por el momento, ninguna detenida--, entre ellas el propietario de la empresa, el propietario del taller, la técnica del taller y conductores que «repetidamente» utilizaban los tacógrafos modificados.

Fuentes policiales han explicado a Europa Press que esta es la primera investigación a nivel nacional que han llevado a cabo los Mossos d'Esquadra y la Guardia Civil desde que la Fiscalía, en 2020, remitió las directrices para perseguir penalmente las manipulaciones de tacógrafos como delito de falsedad documental.