En una solemne ceremonia en la Plaza de San Pedro, el Papa canonizó a la madre Mary MacKillop, además de a otras figuras de la iglesia de Polonia, Canadá, España e Italia que vivieron entre los siglos XV y XX.
Decenas de miles de peregrinos australianos viajaron a Roma para asistir a la misa donde el Pontífice leyó un decreto de santidad para MacKillop, uno de las pocos santos de la historia de la Iglesia Católica que fueron excomulgados y más tarde reinsertados.
Hermanas de San José
MacKillop, hija de inmigrantes escoceses, fue una enérgica monja que fundó la orden de las Hermanas de San José del Sagrado Corazón en 1867 para ayudar a los pobres y educar a sus hijos.
Su carácter independiente la llevó regularmente a chocar con la jerarquía masculina de la Iglesia y las tensiones terminaron provocando en 1871 su excomunión: la mayor sanción de la Iglesia católica, que niega el sacramento a una persona. La pena fue posteriormente retirada.
Documentos recientemente publicados en Australia indicaron que MacKillop fue apartada de la Iglesia en parte porque descubrió un caso de abuso sexual de un niño a manos de un sacerdote irlandés.
Tras los nuevos documentos, algunos activistas en la Iglesia han pedido al Vaticano que la declare santa patrona de aquellos que sufrieron abusos sexuales por parte de sacerdotes.
El reverendo James Martin, un destacado comentarista católico, escribió recientemente en América, la publicación de los Jesuitas en Estados Unidos, que ese nombramiento sería apropiado para una persona a la que calificaba como una santa «delatora».
«Sólo recientemente ha comenzado la Iglesia a ver a los delatores como necesarios, y santos», escribió el influyente comentarista. «Víctimas y familias de las víctimas tienen ahora a alguien nuevo a quien rezar en sus luchas en busca de justicia y reconciliación», agregó.
2 comentarios
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Ahora resulta que el que denuncia a un cura pederasta es un delator... Hasta lo recalcan: Fue una delatora pero aún así la canonizaron. No fue una delatora, fue una mujer con valor civil, que a pesar de la posibilidad de perderlo todo, tuvo los aguacates suficientes para denunciar algo horrendo hecho por uno de los santos varones de la iglesia...
¿Hay alguna otra entidad religiosa más alejada del mensaje evangélico que la propia Iglesia Católica? Ahora se ven obligados de cara a la galería a dar la imagen de que rectifican, beatifican y santifican -con lo baratita que es la santa parafernalia-, para seguir comiendo el coco, engañando el alma y violando el cuerpo. Estos son los jefes de gente de base dedicada a predicar con el ejemplo del respeto, del amor, de la solidaridad. Una vergüenza.