Imagen de uno de los escaners corporales. | ultimahora.es

Gran Bretaña inmplementó el lunes los escáneres corporales en el aeropuerto de Heathrow y Manchester, una medida apresurada tras un fallido ataque de un extremista musulmán con explosivos atados a su pierna en un avión que partió desde Amsterdam hacia Estados Unidos.

La medida se extenderá al aeropuerto de Birmingham este mismo mes y al resto de aeropuertos del Reino Unido a partir de marzo. «Dado el actual nivel de amenaza a la seguridad, el Gobierno cree que es esencial empezar a introducir los escáneres inmediatamente», dijo el secretario de Transporte, Andrew Adonis.

Gran Bretaña elevó a «severo» su nivel de amenaza de terrorismo, el segundo nivel más alto, el 22 de enero, días antes de que Londres fuera el anfitrión de dos conferencias internacionales sobre Yemen y Afganistán. Las conferencias se realizaron la semana pasada sin incidentes de seguridad.

El Gobierno británico ha estado particularmente preocupado por el fallido intento del sospechoso Umar Farouk Abdulmutallab, un nigeriano, de hacer estallar un avión que se dirigía a Detroit el 25 de diciembre debido a que el joven había estudiado en Londres entre el 2005 y el 2008.

Abdulmutallab abordó el vuelo estadounidense en el aeropuerto Schiphol de Amsterdam, que ya posee 15 escáneres corporales y planea instalar más. Francia e Italia también han señalado que les gustaría empezar a utilizar los artefactos en sus aeropuertos.

En un comunicado, Adonis dijo que los aeropuertos de Heathrow y Manchester, en el norte de Inglaterra, eran los primeros en que se requería el uso de escáneres y que la medida sería implementada en otros recintos.

Este mes se implementarán escáneres en el aeropuerto de Birmingham, en el centro de Inglaterra.

«En el futuro inmediato, sólo una pequeña proporción de pasajeros aéreo serán elegidos para ser escaneados. Si un pasajero es electo para ser escaneado, y se niega, no se le permitirá volar», comentó Adonis.