Armengol encara el 23J con listas muy renovadas y Pere Joan Pons irá al Senado

El PSOE logró dos escaños en el Congreso en las elecciones de 2019. El número uno de entonces, Pere Joan Pons, será candidato al Senado por Mallorca, igual que Teresa Suárez, hasta ahora consellera de Presidencia del Consell. Fue la propia Armengol quien dio cuenta de las candidaturas (que ratificará el próximo sábado el Comité Federal del PSOE, con cuya dirección ya están pactadas).

La número dos en las pasadas elecciones había sido Sofía Hernanz y Pedro Sánchez la quiere en su equipo. Lo que ocurre es que Menerca e Ibiza (Hernanz es ibicenca) se alternan de manera habitual y hacía tres elecciones que el número dos era para esa isla. Esta vez tocaba Menorca. Armengol auguró que hay sitio para Hernanz pues el PSOE seguirá gobernando. Tanto para Menorca como para Ibiza, el PSIB está negociando con el resto de partidos de izquierda, concretamente con Podemos, con Més per Menorca y con Ara Eivissa, una candidatura unitaria. En esas Islas sólo se elige un escaño y son habituales ese tipo de pactos.

Por unanimidad

La lista al Congreso es totalmente renovada. También la del Senado. Ni Cosme Bonet ni Susana Moll repiten. Bonet es secretario de Organización del PSIB y pieza clave en la estrategia electoral del partido. Ni Bonet ni nadie en la ejecutiva (que aprobó por unanimidad la candidatura) quisieron aclarar si éste, Bonet, será el candidato de designación autonómica, el que tiene que elegir el futuro Parlament, a propuesta del PSIB. O Bonet o Hernanz. Hace cuatro años se llegó a un acuerdo para que fuera de Més pero ahora eso en impensable.

Armengol, agradeció la labor de quienes se van y no quiso abordar ningún otra cuestión en su comparecencia; ni siquiera si recogerá el acta de diputada autonómica que logró el 28 de mayo. Podría hacerlo e, incluso, asistir como diputada al debate de investidura de Marga Prohens, la candidata del PP. Afirmó que lo importante son las generales y que se «dejará la piel» para evitar la vuelta atrás que supondría «un gobierno de la derecha extrema y la extrema derecha» en España. Afirmó que «cuando llegue el momento» desvelará si recoge el acta aunque la deje poco después.