LA CREACIÓN. El Ibiza MICE Summit se creó precisamente en tiempos de pandemia como un evento necesario para impulsar de nuevo todo el sector. «Me incorporé como directora del Palacio de Congresos en octubre de 2020, en plena pandemia. Una de las cosas que pensé es que teníamos que promocionar Eivissa como destino MICE y volver a poner en marcha todo lo que se perdió en la pandemia del coronavirus», rememora Fina Riera, directora del Palacio de Congresos, quien recuerda que su sector fue el primero en cesar su actividad y el último en recuperarla. Así también lo recuerda Ana Sánchez, gerente de Ibiza Convention Bureau, el club de producto de Fomento del Turismo dedicado a este segmento turístico. «La primera señal de que algo pasaba fue la cancelación del Mobile Congress de Barcelona. A raíz de ahí a principios de marzo de 2020 se empezó a parar todo hasta que llegaron las restricciones. Fue el sector que más tarde retomó su actividad por las restricciones y por el miedo de las empresas en sí a organizar eventos», expresa Sánchez. Sin embargo, este parón de actividad les reafirmó a ambas que debían seguir apostando por promocionar el turismo MICE en Eivissa y fue cuando impulsaron el Ibiza MICE Summit, que este año ha alcanzado su tercera edición con ponentes de gran prestigio.
Tanto Riera como Sánchez coinciden en afirmar que tras la pandemia el segmento de turismo MICE en la mayor de las Pitiüses ha tenido un efecto «descorche de botella». Y es que el año pasado, que ya no había restricciones a la movilidad ni de distancia física, se recuperaron todos los eventos cancelados o pospuestos por el coronavirus, además de programarse nuevos eventos. «Fue muy buen año, espectacular. Además de recuperar eventos aplazados o cancelados, las empresas tenían presupuesto para organizar nuevos encuentros y había ganas de reconectar equipos y dar incentivos tras los meses duros de teletrabajo y distancia social», explica Sánchez.
Las cifras hablan por sí solas: el año pasado acabó con 145 eventos (siete congresos, cinco convenciones internacionales, 25 formaciones y 12 foros, entre otros) y pasaron por el Palacio de Congresos de Eivissa más de 35.000 personas, según afirma Fina Riera. «Este año cerraremos con cifras muy parecidas, aunque he de destacar que el mes de octubre ha sido brutal. Hemos tenido entre la última semana de septiembre y la última de octubre dos eventos de 360 personas cada uno, otra convención de 350 personas, otra de 550 y un congreso de 700 personas. Mucho movimiento de gente», precisa la directora del Palacio de Congresos de Eivissa. En cuanto a las previsiones que manejan de cara al año que viene, tanto Ana Sánchez como Fina Riera esperan que «como mínimo sea como el presente ejercicio», si bien destacan que una de las tendencias que ha dejado la pandemia del coronavirus «es que se trabaja más al último minuto, cuando antes las empresas planificaban mucho más», precisa Sánchez. Además, prevén que se produzca un adelanto de temporada, ya que hay hoteles que han confirmado a la gerente de Ibiza Convention Bureau que abrirán a mediados de marzo porque tienen eventos y congresos confirmados, «algo que es muy positivo y que contribuye a la desestacionalización general de la isla».
DESTINO CONSOLIDADO. Ibiza Convention Bureau (ICB) nació en el año 2011 como un club de producto de la patronal Fomento del Turismo con la intención de promocionar este tipo de turismo en la isla. En ese año, el ICB tenía 27 empresas asociadas y en la actualidad son cerca de 80, lo que es «un claro reflejo de cómo ha evolucionado la isla en los últimos años», precisa la gerente de ICB, quien defiende que Eivissa es un destino MICE muy consolidado, si bien reconoce que hay ciertos aspectos a mejorar, como el tema de las conexiones aéreas en invierno y en temporada baja.
En esta misma línea se expresa la directora del Palacio de Congresos, «en invierno estamos cojos en conexiones aéreas, sobre todo internacionales. Yo puedo ofrecer el Palacio de Congresos y que esté abierto y disponible, pero necesito hoteles y conexiones aéreas. Tengo solicitudes en invierno, pero tienen que ir acordes con la oferta hotelera que están buscando y tener vuelos para venir. Es cierto que para los hoteles es complicado abrir o mantener abiertos para los eventos. En invierno tenemos conexiones aéreas internacionales, pero necesitaríamos más para tener una activación real de la temporada baja», precisa Riera.
Dentro del segmento MICE, Eivissa destaca como destino «muy de incentivos, corporativo y de presentación de producto». De hecho, la marca ‘Ibiza’ en sí atrae ya de por sí a la hora de organizar, por ejemplo, viajes de incentivos o presentaciones de productos. La parte más congresual es la que habría que potenciar, ya que es la que tiene menor presencia, según destaca Ana Sánchez. Precisamente en este punto es donde entra en juego la segunda fase del Palacio de Congresos cuyo proyecto está redactado y está a la espera de asignación presupuestaria por parte de las instituciones para que pueda llevarse a cabo. Esta segunda fase permitirá que se organicen congresos y eventos corporativos más grandes, ya que dispondrá de una gran sala diáfana en la que, además, se podrán dividir espacios y tendrá suelos hidráulicos que permitirá tener un patio de un millar de butacas, «algo muy interesante para los congresos», precisan. Otra de las principales ventajas es que se podrán organizar varios eventos a la vez, algo que ahora no es posible.
EL PERFIL. La directora del Palacio de Congresos y la gerente de ICB recuerdan que el visitante de turismo MICE y de incentivos tiene un gasto turístico diario medio de entre 330 euros y 360, bastante más elevado que el turista de ‘sol y playa’. Además, son potenciales visitantes en un futuro en compañía de amigos y familia. «Son prescriptores del destino. Suelo decir que son ‘turistas dobles’ si llega a la isla para un evento de dos o tres días es probable que estemos ante un potencial cliente que quiera abrirse a conocernos y que ni siquiera nos tenía en el radar. En los últimos años está la tendencia ‘bleisure’, es decir, aquel turista que viaja por negocios o trabajo y que alarga su estancia en el destino para hacer turismo y descubrir el destino por su cuenta, algo «muy interesante» para la isla, según reconoce la gerente del ICB. En cuanto a nacionalidades, no predomina ninguna en especial, ya que llegan viajeros MICE de todo el mundo. De cara al año que viene el ICB prepara varias acciones promocionales para estar presentes en ferias del sector en Estados Unidos y así captar la atracción de los estadounidenses, canadienses y latinoamericanos.
ECONOMÍA. Además de que el gasto medio por turista de este tipo de viajero sea más elevado que el del vacacional, cabe destacar el efecto «dinamizador» del MICE en la economía de la isla, ya que se necesitan empresas de montaje, catering, servicios de venta, transporte, además de otros menos relacionados con el turismo pero sí interesantes como audiovisuales, azafatas o de traducción, por ejemplo. «Es, sin duda, un sector clave para dinamizar la economía durante todo el año y así generar empleo porque se trabaja más en los extremos de temporada», precisa la directora del Palacio de Congresos, quien concluye recordando que ayuda a desestacionalizar.
