La rentabilidad hotelera se ha incrementado de forma espectacular en los meses centrales de la temporada alta y, a falta de las estadísticas oficiales, es previsible que siga en aumento en el tramo final del año. En este sentido, la pandemia provocó un claro retroceso en la actividad turística, que llegó a paralizarse por completo durante el confinamiento. La actividad fue recuperándose de forma paulatina y ya en 2022 los indicadores de rentabilidad hotelera se situaron por encima de las cifras prepandemia. En todo caso, la alta inflación penalizó en gran medida a los empresarios. Durante los meses de julio y agosto de este año, los hoteleros han podido subir los precios y, además, han visto como la inflación se moderaba de forma importante.
En este sentido, los ingresos por habitación disponible se situaron en Balears en 145,7 euros durante el pasado julio. El incremento, respecto a 2022, fue así del 7,25%. La tarifa media diaria, por su parte, se situó en 163,2 euros en Balears con un incremento interanual del 7,33%. El aumento del RevPar y el ADR es mucho mayor que el IPC de julio, que se situó en el 3%. En el Índice de Precios al Consumo de julio hay que destacar el importante incremento de los alimentos (11,3%), las bebidas no alcohólicas (14%) y las bebidas alcohólicas (9,4%). En cambio, es imprescindible señalar también el espectacular retroceso de la electricidad, el gas y otros combustibles que bajaron un 36,5% respecto al año anterior.
El IPC de julio fija en el 26,8% el aumento de los paquetes turísticos y en el 14,9% el incremento de los servicios de alojamiento. En agosto, los ingresos por habitación disponible en el conjunto de Balears alcanzaron los 163,8 euros y el incremento interanual se disparaba hasta el 11,9%. La tarifa media diaria, por su parte, fue en agosto de 177,7 euros, con un incremento respecto al año anterior del 19,91%. El IPC, por su parte, se quedaba en el 3,1%. En agosto, los alimentos aumentaron un 10,5%, mientras que las bebidas no alcohólicas subían un 13% y las alcohólicas un 7,7%. Destaca también el importante retroceso de la electricidad, el gas y otros combustibles, que bajaron un 42,6%. Destacar también que en agosto, el IPC señala que los paquetes turísticos subieron un 22,2% y los servicios de alojamiento un 13,5%.
POR ISLAS. Los ingresos por habitación disponible más elevados se dieron en las Pitiüses, tanto en julio como en agosto. Alcanzaron los 205,4 euros en julio, mientras que en agosto se situaron en 216,5 euros. En julio, Eivissa y Formentera experimentaron la mayor variación internaual situándose en el 11,45%, mientras que el incremento en agosto fue del 8,91%, inferior al registrado en Mallorca y Menorca. En Mallorca, el RevPar fue de 129,6 euros en julio aumentando así un 6,87% respecto al año anterior. En agosto, en cambio, alcanzaron los 146,9 euros tras experimentar un incremento del 15,63%. Destacar también que los ingresos por habitación disponible experimentaron en Menorca un incremento del 5,21% en julio, alcanzando los 148,3 euros. El RevPar se quedaba así en Menorca lejos del registrado en las Pitiüses (205,4), pero por encima del de Mallorca (129,6). En agosto, los ingresos por habitación disponible se situaron en Menorca muy cerca de los 200 euros (197,5) con un aumento interanual del 13,66%. La tarifa media diaria más alta fue la de las Pitiüses, tanto en julio como en agosto. En julio, el ADR se situó en Eivissa-Formentera en 229,8 euros, con un incremento del 12,01%, el mayor de las islas. En agosto, la tarifa media diaria alcanzó en las Pitiüses los 236,3 euros, un 8,91% más que el año anterior. Es la mayor tarifa media de Balears, pero fue la que menor aumento experimentó en agosto, precisamente por ser tan elevada.
En Mallorca, la tarifa media diaria se situó en julio en 145,5 euros, un 6,81% más que un año antes, mientras que en agosto aumentó hasta los 159,4 euros, con un espectacular incremento del 14,36%.
La tarifa media diaria se situó en 166,3 euros en Menorca con un aumento interanual del 6,38%. En agosto, el ADR se situaba por encima de los 200 euros (213), con un aumento del 12,32% respecto a 2022.