La importancia de la información compartida entre todos los participantes de los procesos en torno a la aeronave (compañías, agentes handling, proveedor de servicios de navegación aérea y gestor aeroportuario) es la base en la que se fundamenta el programa A-CDM (Airport Collaborative Decision Making), impulsado por Eurocontrol. El aeropuerto de Palma de Mallorca comenzó su andadura en el programa hace aproximadamente un año. Durante todo este tiempo AENA, Enaire, compañías aéreas y agentes de servicios handling han establecido los procedimientos y sistemas para conseguir poner en común la información que dispone cada uno, con la finalidad de apostar por la toma de decisiones conjunta basada en dicha información.

La nueva hora TOBT ( Target Off Block time) es la hora objetiva a la que todo proceso relacionado con la aeronave debe estar listo para poder salir (pasajeros embarcados, maletas cargadas en la bodega, pasarela retirada…); por lo tanto, también es la protagonista de esta nueva manera de gestionar las aeronaves en el aeropuerto, siendo compartida por todos los involucrados y en base a la cual se secuencia el vuelo de salida, dándole un orden de despegue en la pista.

Desde inicios del año 2016 el proyecto ha ido madurando. Comenzamos consensuando y estableciendo la forma de trabajar entre todos los intervinientes. Posteriormente pasamos a la fase de formación y prueba de los diferentes sistemas. Acabamos el año 2016 siendo Aeropuerto CDM informativo, transmitiendo a los pilotos la información necesaria que iban a necesitar para cuando fuéramos certificados por Eurocontrol. El 2017 empezó apasionantemente con las primeras conexiones e intercambio de información con Eurocontrol y progresivamente el aeropuerto fue asumiendo su rol como A-CDM. Tanto esfuerzo por parte de todos los implicados ha tenido su reconocimiento: a principios de mayo, algunos meses antes de lo previsto, hemos superado con éxito las pruebas para obtener el certificado como aeropuerto CDM, plenamente integrado en la red de Eurocontrol.

Los beneficios esperados con la implantación del proyecto redundan en cada uno de los actores: aumenta la eficiencia de la operativa, se reducen las demoras, se incrementa la predictibilidad de las operaciones y se optimizan los recursos humanos y materiales. Todo ello supone la prestación de un servicio de más calidad y una mejora en la satisfacción del pasajero. Además, las compañías reducirán sus costes en combustible ya que se minimizan las esperas de las aeronaves en cabecera y se disminuyen los tiempos de rodaje desde el estand hacia las cabeceras de las pistas. Por otro lado, indirectamente se produce una reducción en la emisión de gases de las aeronaves que repercute positivamente en el impacto medioambiental.

Con la certificación CDM del aeropuerto de Palma de Mallorca ya son veintidós los aeropuertos europeos que forman parte del sistema A-CDM, entre ellos se encuentran Adolfo Suárez-Barajas, Barcelona-El Prat, Múnich, París- Charles de Gaulle, Fráncfort, Londres-Heathrow y Düsseldorf.

Como siempre, mi agradecimiento a todas aquellas personas y organizaciones que con su esfuerzo e involucración han hecho posible que el aeropuerto consiga la certificación como aeropuerto A-CDM, posicionándonos como un aeropuerto moderno y plenamente integrado en el grupo de aeropuertos a la cabeza de la innovación en Europa.