XI premios Joves Empresaris

El ganador del premio Jove Emprenedor recibió un paquete de servicios de apoyo empresarial que le ayudará a llevar adelante su proyecto, justo ahora que es el momento en que más lo necesita, valorado en 5.296 euros. Además de la promoción que se les da en medios de comunicación, redes sociales, etc. por haber conseguido el galardón por un jurado profesional.

Y ya está. Si alguno de los finalistas o premiados espera que alguien les ayude en algo, y más si ese alguien es la Administración, van mal encaminados. Porque emprender es fácil, lo difícil es vivir después de la empresa que has creado. Normativas difíciles de entender y cumplir, como la de prevención de riesgos laborales o la protección de datos de carácter personal, obligaciones contables, fiscales y laborales, etc... Son muchas cosas que hay que tener en cuenta, y a un emprendedor de una pequeña o mediana empresa al principio de su actividad le cuesta poder cumplir por la falta de recursos.

Aun así, si algo se ha podido comprobar en estos premios es que siguen existiendo emprendedores con ideas y ganas de llevarlas a cabo, a pesar de la educación recibida en nuestro sistema educativo y de la sociedad en general. Hace 20 años te decían “estudia y sácate una oposición para ser funcionario”. Ahora te dicen: “Estudia y encuentra un trabajo para toda la vida”. A la nueva generación se le debería decir: “Estudia para no ser un ignorante, especialízate en lo que a ti realmente te guste y plantéate si la autocupación, ya sea vestido de profesional liberal, emprendedor o empresario, es una opción que pueda hacer que tengas una vida laboral plena”.