—Usted ha conseguido fotografiar a todo tipo de gente y quien la conoce dice que siempre saca lo mejor de ellos. ¿Cuál es su secreto?
—Ser fiel a ti misma y honesta con todo lo que haces. Lo más importante es ser natural porque al final eso se transmite a la persona que estás fotografiando. Y así soy yo, sin dobleces.
—¿Entonces es el consejo que nos da para conseguir un buen retrato?
—Por supuesto. Y el ser feliz también. Hay que disfrutar de cada momento de nuestra vida a tope, siempre dentro de unos límites, porque nunca sabes donde puedes estar mañana.
—Usted es venezolana pero lleva casi dos décadas viviendo en Londres. ¿Cuándo decidió que se quería dedicar a la fotografía de retratos?
—Pues fue en Venezuela hace ya mucho tiempo. Cuando tenía 16 años yo trabajaba como fotógrafa de prensa para un periódico de mi país, y un día cuando paseaba con mis amigos adolescentes, fuimos parados por la policía cuando allí son las últimas personas en las que confiar. El caso es que cuando nos iban a robar o detener, uno de ellos me llevó a un aparte y me preguntó si yo le había hecho unas fotografías que él tenía enmarcadas en su casa junto a otras imágenes de su mujer. Y al decírselo vi tal alegría y emoción en su cara que supe que me tenía que dedicar a hacer felices a los demás.
—¿Lo consigue con sus fotos?
—Pienso que sí. A lo largo de todos estos años he fotografiado a muchísimas personas de todo tipo y todas han quedado encantadas con las imágenes porque no se esperaban el resultado. Creo que es porque las hago sentirse a gusto y consigo que abran su corazón incluso cuando llegan al estudio tras haber pasado uno de sus peores días, como pasó con Courtney Love.
—Parece usted muy feliz con su vida.
—Lo soy sin duda. Además tengo la suerte de estar rodeada de gente maravillosa por todos lados, tanto personal como profesionalmente. De hecho tengo un equipo repleto de gente muy talentosa a mi alrededor y yo simplemente me encargo de dirigirles para que todo fluya. Siento como si fuera el universo el que los ha puesto a mi alcance y yo no los voy a desaprovechar porque si se ve la vida con optimismo todo es mucho más fácil.
—Conexión humana lo llaman. Pero eso en ocasiones es difícil de conseguir...
—Puede ser pero hay que intentarlo. Odio a los que empiezan el día sin energía o robándome la mía. Por eso también en muchas de mis fotografías se refleja lo que yo estoy viviendo en ese momento, desde rupturas con mis novios, conversaciones con mis amigas o, incluso, una noche de borrachera en algún lugar.
—¿Tal vez por ello su exposición Free coman también apoya una causa solidaria?
—Por supuesto. Siempre quise que mi trabajo pudiera ayudar a más gente que a los simples fotografiados. Por eso he apostado por la organización solidaria Teenager cáncer trust, que hace un trabajo increíble por todos aquellos que sufren esta infernal enfermedad. Han sido seis meses de mucho trabajo pero siento que han merecido mucho la pena.
—¿Por qué eligió Pikes Hotel?
—Por que es un lugar emblemático dentro de la isla de Ibiza por su relación con el rock and roll, un mundo al que también estoy muy unida. Siento que hay un vínculo muy especial entre este hotel y yo.
—¿No ha resultado arriesgado? No es una galería de arte al uso...
—Puede ser, pero también ha sido un gran reto. Ten en cuenta que el hotel no tiene paredes como otras galerías y eso también me ha venido bien para plasmar la idea de vivir en libertad y sin paredes ni fronteras que yo quería. Además tiene unos espacios increíbles como la piscina y la pista de tenis donde hemos colocado las instalaciones como si fueran campañas de publicidad para reflejar esta mezcla de fotografía comercial y artística.
—¿Había estado antes en Ibiza? ¿A quién le gustaría fotografiar?
—He estado ya muchas veces en esta isla y me encanta. Es maravillosa. Y la verdad que no he pensado en nadie en especial porque muchas veces estas cosas salen cuando menos te lo esperas. Cuando más buscas a veces menos encuentras.
LA CITA
FREE WOMAN
La exposición de Diana Gómez se inaugura hoy a las 20.00 horas en el Hotel Pikes de Sant Antoni. Junto a la muestra se organizan una serie de actividades complementarias como el concierto en directo de Primal Scream el próximo 29 de agosto, el salón de peluquería pop-up de Lyndell Mansfield o la sesión de fotos en vivo de la propia Diana Gomez para el sábado 27 de agosto.
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