Sílvia Sànchez (dcha.) junto a los 14 niños participantes en el curso.

Después de cinco días de atender las explicaciones de la arquitecta Sílvia Sànchez, La Arquiteca, los catorce alumnos del primer curso de arquitectura lúdica se atrevieron ayer, en la última jornada del taller, a dar forma a sus propias ideas a través de pequeñas maquetas. Durante toda la mañana volcaron su imaginación y su entusiasmo en levantar viviendas, rotondas e incluso un rascacielos. Las mesas de trabajo eran una especie de caos controlado de tijeras, pintura, cartulinas y otros materiales con los pequeños yendo de un lugar a otro para encontrar el material más adecuado para su proyecto.

De este modo culminó ayer esta iniciativa de Sànchez que ha contado con la colaboración de la demarcación pitiusa del Col·legi Oficial d'Arquitectes de les Illes Balears, en cuya sede, concretamente en el Espai Broner, se ha llevado a cabo el curso, y de Ibiza Family Company.

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