«Estoy encantado»

El Festival Ibiza Jazz 2009 comenzó ayer en el baluarte de Sant Pere con un músico de lujo, Joachim Kühn (Leipzig, Alemania, 1944), considerado como una de las figuras más destacadas de la vanguardia europea. Desde muy joven se vio influenciado por el bebop y, más concretamente, por el saxofonista John Coltrane. Tras una época con la formación de Jean-Luc Ponty, Kühn se instaló en París y puso su carrera a toda velocidad gracias al trío que formó junto a Daniel Humair y Jean-François Jenny-Clark. Tras compartir grabaciones y escenarios con músicos como Ornette Coleman, Michel Portal o Joe Lovano, entre otros muchos, Kühn redujo el ritmo de sus actividades en los noventa, coincidiendo con su asentamiento en Eivissa. Pero las muchas solicitudes para contar con su magisterio al piano le han llevado de nuevo a un intenso ritmo de trabajo, buena muestra del cual es su último disco, Out of the desert, que presentó anoche en Dalt Vila en compañía de sus acompañantes favoritos: Majid Bekkas, un virtuoso del laúd y el gembri (un arcaico instrumento de cuerda), además de cantante. Una auténtica estrella en Marruecos; y Ramón López, un reconocido percusionista de amplia trayectoria.

-¿Cuántas veces ha participado ya en el festival de jazz de Eivissa?

-Esta es la segunda vez que toco en este festival. La primera fue hace cuatro años, creo, con el Ibiza Trío (Gori, Chema y yo). Ahora vengo con mi grupo habitual favorito: Majid Bekkas y Ramón López, que espero que sea del agrado de los aficionados de la isla.

-¿Qué van a ofrecer?

-No tocaremos jazz puro, cool, sino más bien free jazz, con influencias de la música marroquí y una serie de canciones fusionadas. Creo que es una bonita propuesta en torno a mi nuevo disco, Out of the desert, que acaba de salir. Por cierto, que estoy encantado de volver a tocar en la que considero mi ciudad.

-¿Cuántos años lleva viviendo en la isla?

-Desde hace 15.

-¿Siempre por la zona de ses Salines?

-Pues sí; y además es un sitio que con los años me va gustando más y lo disfruto mejor.

-¿Sale mucho a tocar por esos mundos?

-Bastante; hay rachas en las que no paro. Acabo de volver de Alemania, donde he estado dando varios conciertos. También hemos tocado en Francia, Portugal, Suiza, España... Básicamente, me muevo por toda Europa.

-¿Está el aficionado más familiarizado ya con su música?

-Bueno, llevo 15 años dando conciertos profesionales; no sé si la gente toma ya mi música como algo familiar o no, pero estoy feliz de poder tocar la música que me gusta. Y parece que también les gusta a los demás, pues muchos vuelven a escucharme.

-¿Tocará aquí sólo el piano o cogerá también el saxo?

-En principio, mi instrumento es el piano, que será el protagonista principal del concierto; pero cuando veo que el piano no basta, entonces tomo el saxo. Depende de cómo sienta el momento.

-¿Se va a quedar algunos días de vacaciones en Eivissa?

-Nunca tomo vacaciones, pues mi vida son una continuas vacaciones. No hago diferencia entre vacaciones y trabajo. La música ocupa todo mi tiempo. He estado tocando sin parar hasta agosto. Ahora me quedaré un poco por aquí, aunque este año está haciendo bastante calor. Pero como estoy en mi casa, con aire acondicionado y tocando música todo el día (no voy a la playa), resulta más agradable.

-¿Sigue pintando?

-Sí, por supuesto; y haciendo progresos, creo que cada vez me sale mejor. Hasta me estoy atreviendo con la escultura. Así que, la verdad, estoy realmente ocupado día y noche.

-¿No tiene previsto hacer alguna exposición?

-No sé; la verdad es que lo hago por mi propio placer; y si alguien quiere ver mis obras, que pase por mi casa. Aunque igual un día me atrevo y organizo una exposición. Veremos.