La escultura 'Anell Vermell I', de Josep Sirvent, expuesta en Arco. Foto: J.SEVILLA

JOSÉ SEVILLA x MADRID

Balears no está de moda para la organización de la Feria Internacional de Arte Contemporáneo Arco 09, instalada en el recinto ferial de Madrid del 11 al 16 febrero que hoy inaugurarán los Príncipes de Asturias. Bàrbara Galmés, consellera de Cultura del Govern, visitó ayer la feria.

Si el año pasado cuatro galerías mallorquinas -habitualmente las más numerosas de Balears y que sobrepasaban la media docena- participaron esta cita, en la 29ª edición, marcada por la crisis, sólo figuran dos, Pelaires y Maior. De las Pitiüses no hay noticias desde hace algún tiempo en la gran cita del arte en España.

El propietario de Pelaires, Pep Pinya, ha decidido afrontar la crisis con «ilusión, ganas y positividad». En su apuesta para este año hay dos artistas autóctonos: Guillem Nadal y Carles Valverde, junto a otros 10 artistas. En cuanto a que no exhiba más obras de creadores isleños, arguye que alterna su presencia en ésta y otras ferias internacionales como la de Bolonia. «Apostamos por la calidad y la sorpresa», señaló Pinya, quien pide más apoyo al Govern. «A nosotros nos dan una pequeña ayuda, cuando, por ejemplo, el Gobierno portugués patrocina a todos sus galeristas», apuntó el galerista desde su stand de 160 metros cuadrados (a 250 euros el metro). «Estaría satisfecho con vender las 10 ó 12 obras del año pasado», añadió, y rechazó valorar los actos de promoción de la cultura balear organizados hasta el próximo viernes en Madrid por el Ejecutivo autonómico: «En Arco el Govern no organiza nada».

Pelaires muestra piezas de Domenico Bianchi, Mark Francis, Nigel Hall, Rachel Howard, Alejandra Icaza, Santi Moix, Miquel Navarro, Felicidad Moreno, José Antonio Orts, Frank Stella y Donald Sultan.

La responsable de Maior, Jero Martínez, destacó su apoyo a los jóvenes creadores. La mitad de su stand lo ocupan autores mallorquines, como Aina Perelló (finalista premio Ron Brugal de Arco), Joan Cortés y Amador, Mònica Fuster y la menorquina Núria Marqués, a los que acompañan Daniel Canogar, Roland Fisher, Luis Gordillo, Susana Solano, Eva Lootz, Nicholas Woods y Tim White.

«Este es el escaparate perfecto para que nuestros artistas sean vistos», apuntó Jero, que reclamó más apoyo institucional. «Desplazarnos tres personas es muy costoso y, en definitiva, representamos la cultura balear en el exterior». ¿Y la crisis? «La afronto con optimismo y los artistas, con mucha ilusión». En su stand ha invertido 45.000 euros.

También está en Arco Pep Sirvent con su escultura Anell vermell I, de 800 kilos, creada a partir de acero y granito y expuesta en la galería madrileña Àlvaro Alcázar, junto a un cuadro de Nadal.

Sobre la escasa presencia de galeristas baleares en esta edición, la directora de Arco, Lourdes Fernández, señaló que la feria apuesta por la «calidad y no por la cantidad».

La calidad de nuestros artistas la reconoció Galmés, quien dijo que «no tienen nada que demostrar, todos piensan en Barceló, pero hay otros muchos destacados».