Xicu Lluy, durante su charla.

JULIO HERRANZ

El telón final del II Ibiza International Film Festival caerá a partir de las 20,00 horas de hoy sábado en el Palacio de Congresos de Santa Eulària, donde tendrá lugar la gala de clausura y la entrega de premios. Pero el telón de las proyecciones cayó ayer con la presentación de Love Live Long, el último trabajo de Mike Figgis, quien por la mañana participó con Nacho Campillo en la Mostra Digital en un debate sobre la música en la era digital; y la première de Des Ilusions, de Etienne Faure, filmada en Eivissa.

Rodada el pasado año, Love Live Long transcurre en Estambul, donde Raquel, una guapa chica inglesa, medita sobre el suicidio. Mientras pasea por las calles de la ciudad, una serie de acontecimientos que afectarán a su vida se cruzan en su camino. En cuanto a Des Ilusions, el director explicó ayer a este periódico de qué iba la historia: «Va sobre un escritor francés que decide escribir su nueva novela sobre un ambiente hippy; por lo que viene a Eivissa para reencontrar los viejos hippies y poder así tener información de primera mano. Aquí encuentra una chica muy joven, extraña y misteriosa, con actitud hippy. Se enamora de ella, que al final desaparece misteriosamente. La propuesta del film es que, a lo mejor, todo lo que acabamos de ver forma parte de la novela que el protagonista está tratando de escribir», apuntó el director, quien conoce Eivissa desde hace tiempo.

Hablar del pasado

«Es un lugar mágico al que quiero mucho y al que es necesario proteger. Hace tiempo que tenía ganas de hablar del pasado de la isla a través de una experiencia hippy y mostrar al mismo tiempo todos los cambios, algunos bien traumáticos, que ha sufrido Eivissa; como las autovías famosas, contra la que se manifestaron tanta gente», señaló Etienne Faure, encantado de que la primera proyección de Des Ilusions sea aquí: «Una serie de felices circunstancias, entre otras que justo la acabáramos de terminar, ha hecho que la première sea en la isla, el sitio ideal».

En cuanto a la intervención de Mike Figgis en la Mostra Digital, el director británico se mostró encantado de que «ahora los jóvenes puedan tener toda la música y el cine que quieran a su alcance a través de internet. El mundo ha cambiado y éso forma parte del cambio; aunque los mayores lamenten con nostalgia los viejos tiempos. Pero yo creo que estos cambios suponen una democratización total de la cultura; es un movimiento positivo hacia adelante», afirmó Figgis, quien contó que un día discutió con su amigo David Linch acerca de las posibilidades que cualquiera puede tener con una cámara pequeña, preguntándose: «¿Qué es preferible, volver al cine tradicional o tener más posibilidades con los nuevos formatos? Yo, desde luego, prefiero esta segunda opción», precisó el director de Leaving Las Vegas, llegando incluso a ironizar con el tema: «Como siempre llevo varias cámaras encima, si ahora se cayera este edificio, me pondría al instante a grabar sobre el derrumbe y ganaría una pasta con las imágenes».

Entre las propuestas que ofreció ayer la Mostra Digital, una sección del IFF organizada por el Govern balear, figuraba una conferencia de Xicu Lluy sobre Cardona, un eivissenc a Hollywood. Una historia que se remonta a principios de los años 30 y a la mítica película King Kong, de la productora RKO, en la que Carles Cardona entró en 1929. La contigencia del derrumbe de la Bolsa actuó a su favor, porque para superar la axfisia económica la productora se vio forzada a aguzar el ingenio para obtener lo que buscaba con un mínimo de presupuesto. Los directores de la película, Cooper y Schoedsack recurrieron a Willie O'Brian, un mago de los efectos especiales, con quien trabajaba Cardona, para el diseño y la realización práctica del que sería el legendario King Kong.

Carles Cardona regresó a su isla natal, donde murió en 1979. El periodista e investigador ibicenco recordó en su charla el testimonio que otro periodista e investigador ibicenco, Mariano Planells, recogió del propio Cardona: «Willien nos encargó la construcción de unos esquelos de alumnio que fuesen articulados y capaces de adoptar todas las posturas de un ser vertebrado. Se tenía que cuidad especialmente la forma de la cabeza y la boca del animal. Los hermanos mexicanos Delgado dieron forma al cuerpo del esqueleto con goma espuma para darle forma anatómica a los pectorales y los músculos. Finalmente lo recubrieron de pelo. Unos magos... En realidad construyeron tres simios, que no soprepasaban los 40 centímetros de altura».

Como complemento de la conferencia de Xicu Lluy, por la tarde se proyectó King Kong. Y no fue la única proyección que tuvo ayer la Mostra Digital, pues también se pasó La novia cadáver, de Tim Burton; por la participación de los hermanos Carles y Jordi Grangel, colaboradores de Burton.